viernes, 13 de enero de 2012

ataque con gas...

Un ataque con gas venenoso usando cilindros de gas durante la primera guerra  mundial.
El uso de gas venenoso en la primera guerra mundial fue una importante innovación militar. Los gases utilizados iban desde el gas lacrimógeno a agentes incapacitantes como el gas mostaza y agentes letales como el fosgeno. Esta guerra quimica fue uno de los principales elementos de la primera guerra global y también de la primera guerra total del siglo XX.
La capacidad letal del gas era limitada —solo el 3% de las muertes en combate fueron debidas al gas—, pero la proporción de bajas no letales fue alta, llegando el gas a ser uno de los factores más temidos entre los soldados.Los primeros usos de agentes químicos como armas fueron en forma de irritante lacrimógeno, en lugar de venenos letales o incapacitantes. Aunque generalmente se cree que los gases se utilizaron por primera vez en la Primera Guerra Mundial, hay informaciones de que los espartanos utilizaron gas sulfuroso en el siglo V aC...
Durante la Primera Guerra Mundial, los franceses fueron los primeros en emplear gas, utilizando granadas rellenas de gas lacrimógeno (bromuro de xililo) en agosto de 1914. Alemania respondió con la misma moneda en octubre de 1914, disparando obuses de fragmentación llenos de agentes químicos irritantes contra las posiciones francesas en Neuve Chapelle, aunque la concentración lograda era tan pequeña que apenas se percibió.....El cloro fue el primer agente letal que se empleó. El conglomerado de empresas químicas IG Farben producía cloro como subproducto de la fabricación de tintes. En cooperación con Fritz Haber, del Kaiser Wilhelm Institute de Química de Berlín empezaron a desarrollar métodos para descargar cloro gaseoso contra las trincheras enemigas. El 22 de abril de 1915, el ejército alemán tenía 160 toneladas de cloro repartidas en 5.730 cilindros frente a Langermarck, al norte de Ypres, (Bélgica) A las 17:00, con una ligera brisa del este, liberaron el gas, formando una nube verde grisácea que se desplazó hasta las posiciones de las tropas coloniales francesas, las que abandonaron sus trincheras creando una franja vacía de 7 km en las líneas aliadas....
En lo que acabaría convirtiéndose en la Segunda Batalla de Ypres, los alemanes utilizaron gas en tres ocasiones más; el 24 de abril contra la Primera División de Infantería de Canadá, el 2 de mayo cerca de Mouse Trap Farm y el 5 de mayo contra los británicos en la Colina 60. A esas alturas ya existían defensas contra el gas; la British Official History afirmaba que en la Colina 60:
"murieron 90 hombres por envenenamiento por gas en las trincheras; de los 207 trasladados a las salas de vendaje, 46 murieron casi de inmediato y 12 tras largo sufrimiento."
El cloro era ineficiente como arma. Producía una nube verdosa claramente visible y un fuerte olor, facilitando su detección. Era soluble en agua, de manera que el sencillo recurso de cubrir la boca y la nariz con un paño húmedo, servía para reducir el impacto del gas......
Los británicos expresaron su indignación ante el uso alemán de gas venenoso en Ypres, pero respondieron desarrollando su propia habilidad para la guerra química. El comandante del British II Corps, el teniente general Ferguson, dijo acerca del gas:
 
Es una forma cobarde de hacer la guerra que ni yo ni ningún soldado inglés aprobamos. No podemos ganar esta guerra a menos que matemos o incapacitemos a más enemigos que ellos con nosotros, y si esto solo se puede conseguir copiando al enemigo en su elección de las armas, no debemos rehusar hacerlo.
Las deficiencias del cloro quedaron superadas con la introducción del fosgeno, utilizado inicialmente por los franceses bajo la dirección del químico francés Victor Grignard en 1915. Poco después, los alemanes, bajo la dirección del químico alemán Fritz Haber, lo añadieron en pequeñas cantidades al cloro para aumentar la toxicidad de éste.
El fosgeno era un agente letal muy potente, más mortífero que el cloro. Tenía una desventaja potencial: los síntomas derivados de la exposición al gas tardaban 24 horas o más en manifestarse, lo que hacía que las víctimas podían seguir combatiendo en un principio, pero significaba que las tropas aparentemente sanas, estarían incapacitadas por los efectos del gas al día siguiente.
A veces se utilizaba fosgeno solamente, por ser difícil de detectar, incoloro y con un olor comparable al "heno enmohecido". Sin embargo, es mucho más denso que el aire, y por eso solía mezclarse con un volumen igual de cloro, que con su menor densidad ayudaba a diseminarlo. Los aliados llamaban a esta combinación Estrella Blanca, por las marcas pintadas en las cápsulas que contenían la mezcla.....Durante el primer ataque de cloro/fosgeno combinado de los alemanes, lanzado contra las tropas británicas en Nieltje, cerca de Ypres, Bélgica, el 19 de diciembre de 1915, se liberaron 88 toneladas de gas envasadas en cilindros, causando 1.069 bajas y 120 muertes.En enero de 1916, los británicos añadieron hexametilentetramina a la mezcla química del filtro de sus máscaras de gas como contramedida para el fosgeno.1917.
El gas más infame y efectivo de la Primera Guerra Mundial fue el gas mostaza, un vesicante introducido por los alemanes en julio de 1917 antes de la Tercera Batalla de Ypres. Conocido por los británicos como HS (o Hun Stuff), el gas mostaza no pretendía ser un agente letal (aunque lo era en altas dosis), sino que estaba diseñado para acosar e incapacitar al enemigo y contaminar el campo de batalla. Se disparaba dentro de proyectiles de artillería, y era más pesado que el aire. Se posaba en el suelo en forma de un líquido parecido al jerez, y se evaporaba lentamente sin necesidad de luz solar.
El gas nunca volvió a tener un éxito tan dramático como el que tuvo el 22 de abril de 1915; sin embargo, se convirtió en un arma estándar que, combinada con la artillería convencional, se utilizaba para apoyar la mayoría de los ataques en las fases finales de la guerra. El Frente Occidental fue el escenario principal en el que se empleó el gas — el sistema de trincheras, estático y confinado, era ideal para lograr una concentración efectiva. Sin embargo, Alemania utilizó gas contra Rusia en el Frente Oriental, donde la falta de contramedidas efectivas daría como resultado la muerte de miles de soldados rusos; por su lado, los británicos experimentaron con gas en Palestina durante la Segunda Batalla de Gaza....
No obstante, durante los siguientes años varios países utilizaron armas químicas en distintas guerras, principalmente coloniales, donde contaban con ventajas en equipamiento sobre la otra. Los británicos usaron adamsita contra las tropas revolucionarias rusas en 1919 y gas mostaza contra los insurgentes iraquíes en los años 20; España utilizó armas químicas en la Guerra del Rif a lo largo de los años 20 e Italia utilizó gas mostaza en Libia en 1930 y también durante su invasión de Etiopía en 1935 y 1936. Japón usó gas contra China en 1941.
En 1925, un señor de la guerra chino, Zhang Zuolin, contrató a una empresa alemana para que le construyera una fábrica de gas mostaza en Shengyana que fue terminada en 1927...La opinión pública se opuso en aquel entonces al uso de tales armas, lo que condujo al Protoco de Ginebra un tratado que prohibía el uso (pero no la acumulación) de armas bacteriológicas o de gas letal, que fue firmado en 1925 por la mayoría de los contendientes de la Primera Guerra Mundial.
Sin embargo, el uso de gas mostaza y gas nervioso por parte de Irak durante la guerra Irán-Irak mató a unos 20.000 soldados iraníes (y lesionó a otros 80.000), aproximadamente una cuarta parte del número de muertes causadas por armas químicas durante la Primera Guerra Mundial.
El gas mostaza fue el agente favorito de varias naciones: el Reino Unido acumuló 40.719 toneladas, Rusia 77.400 toneladas, Estados Unidos más de 87.000 toneladas y Alemania 27.597 toneladas.
El gas mostaza con el que los británicos esperaban repeler una invasión del Reino Unido en 1940 nunca llegó a ser necesario y el miedo de que los aliados también tuvieran agentes nerviosos evitó que Alemania los utilizara. No obstante, la tecnología del gas venenoso jugó un papel importante en el Holocausto.
Aunque se han utilizado armas químicas al menos una docena de veces tras el final de la Primera Guerra Mundial, nunca se han vuelto a aplicar a gran escala.......La muerte por gas era especialmente terrible. De acuerdo con Denis Winter (Death's Men, 1978), una dosis letal de fosgeno producía al final una "respiración entrecortada y náuseas, el pulso hasta 120, una tez cenicienta y la secreción de cuatro pintas (2 litros) de líquido amarillo de los pulmones cada hora, de las 48 que duran los espasmos de ahogamiento..
Un destino típico de los expuestos al gas era la ceguera, de los que eran principal causa el gas lacrimógeno y el gas mostaza. Era un espectáculo frecuente ver líneas de soldados cegados, con la mano sobre el hombro del hombre que lo precedía, guiados por un vidente hasta la enfermería. Uno de los cuadros más famosos sobre la Primera Guerra Mundial, Gassed de John Singer Sargent, captura una de las escenas de bajas por gas mostaza que presenció en una enfermería de Le Bac-du-Sud, cerca de Arras, en julio de 1918...
El gas mostaza causó la mayor parte de las bajas en el Frente Occidental, a pesar de que produjo menos cantidad que otros gases irritantes como el cloro y el fosgeno. La proporción de muertes por gas mostaza sobre el total de bajas fue baja; solo murieron el 2% de las bajas, y muchas de ellas sucumbieron por infecciones secundarias más que por el propio gas. Una vez introducido en Ypres, el gas mostaza produjo el 90% de las bajas por gas británicas, y el 14% del total de bajas.
El gas mostaza era una fuente de extremo terror. En The Anatomy of Courage (1945), Lord Moran, que había sido un oficial médico durante la guerra, escribía: "Después de julio de 1917, el gas usurpó en parte el rol de los explosivos en darle a la mente una incapacidad natural para la guerra. Los hombres gaseados eran una expresión de la fatiga de trinchera, una amenaza cuando la humanidad de la nación ya había sido purgada".
No hacía falta inhalar gas mostaza para que éste fuera efectivo — cualquier contacto con la piel era suficiente. La exposición a una concentración de 0,1 ppm era suficiente para causar grandes ampollas. Concentraciones superiores podían quemar la piel hasta el hueso. Era particularmente efectivo con los tejidos blandos de la cara y los genitales. Una exposición típica producía inflamación de la conjuntiva y los párpados de la víctima, forzándola a cerrarlos y dejándola temporalmente ciega. Cuando contactaba con la piel, aparecían inmediatamente manchas rojas y húmedas, que tras 24 horas se convertían en ampollas. Otros síntomas incluían un dolor de cabeza intenso, temperatura y pulso elevados y neumonía...
La muerte por gas mostaza, cuando se daba, era terrible. Un informe post-mortem de los historiales médicos oficiales británicos registra una de las primeras bajas británicas:
Caso cuatro. 39 años de edad. Gaseado el 29 de julio de 1917. Admitido en el hospital de campaña el mismo día. Muerte unos diez días después. Pigmentación pardusca presente en grandes áreas del cuerpo. Un anillo blanco de piel en el lugar donde estaba el reloj de pulsera. Marcadas quemaduras superficiales en cara y escroto. Laringe muy congestionada. Toda la tráquea cubierta de una membrana amarilla. Bronquios contienen abundante gas. Pulmones muy voluminosos. Pulmón derecho muestra gran colapso en la base. Hígado congestionado y graso. Estómago muestra numerosas hemorragias submucosas. Sustancia cerebral excesivamente húmeda y muy congestionada... Ninguno de los contendientes de la Primera Guerra Mundial estaba preparado para la introducción de gas venenoso como arma. Una vez que apareció el gas, comenzó el desarrollo de protecciones contra él, y el proceso continuó durante buena parte de la guerra, produciendo una serie de máscaras de gas cada vez más efectivas. Incluso en la Segunda Batalla de Ypres, el ejército alemán, que todavía no estaba seguro de la efectividad del arma, solo distribuyó máscaras de respiración a los ingenieros que trataban con el gas. En Ypres, un oficial médico canadiense, que también era químico, identificó rápidamente el gas como cloro y recomendó que las tropas orinasen sobre un trozo de tela y se taparan la boca y nariz con él. La teoría era que el ácido úrico cristalizaría al cloro. El primer equipo oficial que se distribuyó era igualmente primitivo; una almohadilla, normalmente impregnada con un producto químico, atada sobre la parte inferior de la cara. Para proteger los ojos del gas lacrimógeno, los soldados fueron equipados con gafas protectoras..... El siguiente avance fue la introducción del casco antigás — básicamente una bolsa sobre la cabeza. El tejido de la bolsa se impregnaba con un producto químico para neutralizar el gas — pero cuando llovía, el producto químico se mojaba y caía en los ojos del soldado. Las piezas oculares, propensas a empañarse, estaban hechas inicialmente de talco. Al entrar en combate, normalmente los cascos antigás solían llevarse enrollados sobre la cabeza, y se desenrollaban y apretaban en el cuello cuando se daba alarma de gas. La primera versión británica fue el casco Hypo, cuyo tejido se empapaba con hiposulfito de sodio (conocido popularmente como "hipo"). El casco antigás P británico, parcialmente efectivo contra el fosgeno que portaba toda la infantería en Loos, estaba impregnado con fenato hexamina. Se le añadió una boquilla de respiración para evitar la acumulación de dióxido de carbono. El ayudante del Batallón 1/23, el Regimiento de Londres, recordaba así su experiencia con el casco P en Loos:
"Las gafas protectoras se empañaban rápidamente, y el aire entraba en cantidades tan sofocantemente pequeñas que demandaba un continuo ejercicio de fuerza de voluntad por parte de los portadores." En enero de 1916 se distribuyó una versión modificada del casco P, el casco PH, impregnado adicionalmente con hexametilentetramina para mejorar la protección contra el fosgeno. Los respiradores con caja autocontenidos representaron la culminación en el desarrollo de máscaras antigás durante la Primera Guerra Mundial. Los respiradores con caja utilizaban un diseño de dos piezas; una boquilla conectada mediante un tubo a una caja que hacía de filtro. La caja contenía gránulos de productos químicos que neutralizaban el gas, devolviendo aire limpio al portador. Al separar el filtro de la máscara se consiguió proporcionar un filtrado aparatoso pero efectivo.. Para el gas mostaza, que no tenía que ser inhalado para provocar bajas, no se halló ninguna contramedida efectiva durante la guerra. Los regimientos escoceses de Highland, vestidos con kilts, eran especialmente vulnerables a las lesiones por gas mostaza debido a que llevaban las piernas al aire. En Nieuwpoort, algunos batallones escoceses decidieron llevar mallas de mujer debajo del kilt como protección. Se dice que los soldados canadienses habían encontrado una forma de minimizar los efectos del gas mostaza. Como el gas llegaba a los soldados con el viento que soplaba hacia ellos, comprendieron que minimizarían la exposición al gas si, en lugar de huir de él, corrían a través de él. Los franceses, por el contrario, cuando recibían un ataque de gas, huían, y por tanto estaban más tiempo rodeados de gas y sufrían mayor número de bajas. .. El procedimiento de alerta de gas se convirtió en una rutina para el soldado del frente. Para alertar de un ataque de gas, se hacía sonar una campana, a menudo hecha con proyectiles de artillería usados. En las ruidosas baterías de cañones de asedio se utilizaban bocinas de aire comprimido, que se podían oír a 15 kilómetros de distancia. Se pegaban carteles en todos los accesos a una zona afectada, avisando a la gente para que tomara precauciones. Otros intentos británicos de contramedida no fueron tan efectivos. Un plan inicial consistía en utilizar 100.000 ventiladores para dispersar el gas. Se intentó quemar carbón o moissanita. Se propuso equipar a los centinelas del frente con cascos de escafandra para bombearles aire por un tubo desde una distancia de 30 metros.  El primer sistema utilizado para liberar gas masivamente consistió en hacerlo desde cilindros aprovechando los vientos favorables para que el gas se desplazara hasta las trincheras enemigas. La ventaja principal de este método era su relativa sencillez y que, bajo las condiciones atmosféricas adecuadas, producía una nube concentrada capaz de vencer las defensas basadas en máscaras de gas. Las desventajas del lanzamiento de cilindros eran numerosas. En primer lugar, la liberación estaba a merced del viento. Si el viento era inestable, como en el caso de Loos, el gas podía desplazarse hacia las trincheras propias, causando bajas entre los suyos. Las nubes de gas servían bien de aviso, dando tiempo al enemigo para protegerse, aunque muchos soldados se aterrorizaban ante la visión de una nube de gas arrastrándose. Por lo demás, las nubes de gas tenían poca penetración y solo eran capaces de afectar a las trincheras del frente antes de disiparse..Finalmente, era necesario depositar los cilindros justo enfrente del sistema de trincheras, para que el gas se liberara directamente sobre tierra de nadie. Esto suponía que los cilindros se tenían que trasladar a mano a través de las trincheras de comunicación, a menudo obstruidas y anegadas, y almacenarlos en el frente, donde siempre existía el riesgo de que los cilindros se abrieran prematuramente durante un bombardeo. Un cilindro dañado que perdía gas podía producir una espiral de humo reveladora que, en caso de ser reconocida, atraía con seguridad el fuego de la artillería.                       El principal defecto asociado al lanzamiento de gas con artillería era la dificultad de lograr una concentración letal. Los proyectiles tenían una carga de gas pequeña, y era necesario saturar con bombardeos una zona dada para producir una nube de gas similar a la producida con liberación de cilindros. Sin embargo, el gas mostaza no necesitaba formar una nube concentrada y por tanto el vehículo ideal para este veneno era la artillería. La solución para conseguir una concentración mortal sin necesidad de cilindros fue el "proyector de gas", esencialmente un mortero de gran calibre que disparaba cilindros enteros. El proyector Livens británico (inventado por el Capitán W.H. Livens en 1917) era un dispositivo sencillo; un tubo de 8 pulgadas de diámetro clavado en el suelo con un cierto ángulo y un explosivo que se encendía con una descarga eléctrica, disparando el cilindro con 14 o 18 kg de gas hasta una distancia de 1900 metros. Colocando una batería de proyectores y disparándolos simultáneamente se podía conseguir una densa concentración de gas. El Livens se utilizó por primera vez en Arras el 4 de abril de 1917. El 31 de marzo de 1918, los británicos llevaron acabo su mayor "disparo de gas", lanzando 3728 cilindros en Lens...
A=Aliados, C=Potencias centrales
NombrePrimer usoTipoUsado por
Cloro1915Irritante/PulmonesAmbos
Fosgeno1915Irritante/Membranas mucosas y piel, corrosivo, tóxicoAmbos
Cloroformiato de clorometilo1915Irritante/Ojos, piel, pulmonesAmbos
Difosgeno (Cloroformiato de triclorometilo)1916Irritante severo, causa quemadurasAmbos
Cloropicrina1916Irritante, lacrimógeno, tóxicoAmbos
Cloruro estánnico (Tetracloruro de estaño)1916Irritante severo, causa quemadurasA
a-clorotolueno (Cloruro de bencilo)1917Irritante, lacrimógenoC
Éter bis (clorometílico) (éter diclorometílico)1918Irritante, puede nublar la visiónC
Difenilcloroarsina1917Irritante/EstornutatorioC
Etildicloroarsina1918VesicanteC
N-Etilcarbazol1918IrritanteC
Bromuro de bencilo1915LacrimógenoC
Bromuro de xililo1914Lacrimógeno, tóxicoAmbos
Clorosulfonato de metilo1915C
Iodoacetato de etilo1916LacrimógenoA
Bromoacetona1916Lacrimógeno, irritanteAmbos
Bromometil etil cetona1916Irritante/Piel, ojosC
Acroleína1916Lagrimógeno, tóxicoA
Ácido hidrociánico (ácido prúsico)1916ParalizanteA
Sulfuro de hidrógeno (hidrógeno sulfurado)1916Irritante, tóxicoA
Gas mostaza (sulfuro de bis(2-cloroetilo))1917VesicanteAmbos
A=Aliados, C=Potencias centrales
NombrePrimer usoTipoUsado por
Cloro1915Irritante/PulmonesAmbos
Fosgeno1915Irritante/Membranas mucosas y piel, corrosivo, tóxicoAmbos
Cloroformiato de clorometilo1915Irritante/Ojos, piel, pulmonesAmbos
Difosgeno (Cloroformiato de triclorometilo)1916Irritante severo, causa quemadurasAmbos
Cloropicrina1916Irritante, lacrimógeno, tóxicoAmbos
Cloruro estánnico (Tetracloruro de estaño)1916Irritante severo, causa quemadurasA
a-clorotolueno (Cloruro de bencilo)1917Irritante, lacrimógenoC
Éter bis (clorometílico) (éter diclorometílico)1918Irritante, puede nublar la visiónC
Difenilcloroarsina1917Irritante/EstornutatorioC
Etildicloroarsina1918VesicanteC
N-Etilcarbazol1918IrritanteC
Bromuro de bencilo1915LacrimógenoC
Bromuro de xililo1914Lacrimógeno, tóxicoAmbos
Clorosulfonato de metilo1915C
Iodoacetato de etilo1916LacrimógenoA
Bromoacetona1916Lacrimógeno, irritanteAmbos
Bromometil etil cetona1916Irritante/Piel, ojosC
Acroleína1916Lagrimógeno, tóxicoA
Ácido hidrociánico (ácido prúsico)1916ParalizanteA
Sulfuro de hidrógeno (hidrógeno sulfurado)1916Irritante, tóxicoA
Gas mostaza (sulfuro de bis(2-cloroetilo))1917VesicanteAmbos

1 comentario:

  1. Gran aportación de historia,
    no las difamaciones vendidas,tergiversadas y censuradas de los medios..de siempre!

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