¿Por qué American History X fracasa como propaganda?

Fuente Originaria: counter-currents.com

El cuento de moralidad anti-skinhead del director Tony Kaye,  American History X (1998) es una prueba de que la propaganda está lejos de ser una ciencia exacta. Así como la Full Metal Jacket de Stanley Kubrick provocó un aumento en el reclutamiento de marines, American History X en realidad aumenta las simpatías de la audiencia con los skinheads neonazis, a pesar de sus mejores esfuerzos por presentarlos como hipócritas y perdedores odiosos..

Podemos descartar la idea de que Tony Kaye simpatiza en secreto con los cabezas rapadas nazis. Es lo que Derek llamaría un "hijo de puta que lee la Cábala". Llegaba al set en un Lincoln con chofer con la matrícula "JUDÍO".

La hipótesis más probable es que los realizadores se mostraran presumidos. Pensaban que las opiniones de Derek eran evidentemente malas y que sus propias opiniones eran evidentemente buenas. Por lo tanto, sentían que sus respectivas posiciones simplemente debían expresarse en voz alta, sin un argumento real, y la audiencia vería las cosas a su manera.

Pero la gente fuera de las burbujas izquierdistas de la academia y los medios de comunicación no reacciona así. Las normas inteligentes ven la lógica de las posiciones de Derek. Pueden separar las verdades que dice Derek sobre el despojo de los blancos y el mimo liberal de los criminales negros de los violentos adornos de cabezas rapadas. También ven la vacuidad del mensaje liberal de la película. Así, American History X califica como un clásico del cine de derecha , a pesar de los mejores esfuerzos de los realizadores.