Borracho como una mofeta - Sir Winston con su amigo comunista, el tío Joseph, durante una fiesta de borrachos, en el Kremlin, este es el tipo de criaturas que estaban decidiendo el destino de un continente y las vidas de millones de personas.Una carta de la Oficina de Relaciones Exteriores recientemente desclasificado de la Segunda Guerra Mundial describe una sesión alcoholica de tarde-noche entre los líderes Winston Churchill y Joseph Stalin.El memorando fue escrito por Sir Alexander Cadogan, y era parte de un documento altamente confidencial que acaba de ser desclasificado.
Cadogan también describió cómo Churchill le gustaba dedicarse a sus invitados en las comidas con discurso irreverente e irresponsable.
La descripción de la sesión con Stalin está contenida en una carta a Lord Halifax, que era el embajador para los EE.UU..
Al parecer, escrito a finales de 1940, se debe hacer referencia a la visita de Churchill a Moscú en el verano de 1942.
Desafortunadamente Winston no sufrió mucho gusto.Sin embargo, la mañana siguiente, estaba decidido a disparar su último tornillo y pidió hablar a solas, a solas con Stalin.
Cadogan escribe que fue llamado a la habitación de la pareja más tarde esa noche y se encontró la mesa gimiendo bajo el peso de los alimentos de todo tipo coronadas por un cochinillo, e innumerables botellas.
Dijo que Stalin hizo beber algo bastante salvaje a Churchill.
La fiesta continuó hasta las 3 de la madrugada con Stalin borracho como una cuba y el gordo tambien.
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