viernes, 17 de noviembre de 2017

Acólitos de la ideología venenosa..


En esta línea de pensamiento..!esta filosofía es cruda!.
Spengler escribió..."que solo los soñadores creen que hay una salida..el optimismo ciego es cobardía..la adherencia celosa a lo que es delirante es cobardía.."

Como hijos de Europa, todos somos herederos de un pasado ancestral heroico, un pasado que nos desafía a superar nuestras limitaciones. 


El europeo ha dominado su tierra debido a nuestra inclinación a la acción. Como Civilización los europeos somos los responsables de nuestro cambio histórico, y como tales, no estamos obligados a los límites que debilitan a otros.

La grandeza de la raza europea proviene de la dimensión heroica de nuestro ser. Somos los dueños de nuestro destino, porque valoramos la acción, la acción para superarnos a nosotros mismos y a los enemigos externos que no amarían más que a nuestra raza regresar a un estado bestial de producción y consumo sin fin.

Los acólitos de la ideología venenosa basan su nihilismo en una comprensión inadecuada de la preocupación por el resultado para lograr una superación trascendental de las limitaciones del yo. 



Spengler continúa:

"Nacemos en este momento y debemos seguir valientemente el camino hacia el destino. No hay otra manera. Nuestro deber es mantener la posición perdida, sin esperanza, sin rescate, como el soldado romano cuyos huesos fueron encontrados frente a una puerta en Pompeya, quien, durante la erupción del Vesubio, murió en su puesto porque se olvidaron de él. Esa es la grandeza. Eso es lo que significa ser un pura sangre. El final honorable es lo único que no se puede quitar de un hombre "


Nuestra historia es gloriosa, y nuestro reinado ha sido supremo, porque actuamos para superarnos a nosotros mismos y las limitaciones que otros nos imponen. Al admitir que la vida es inútil y que la acción no tiene sentido, estamos capitulando ante las mismas fuerzas que tienen el poder de impulsar a nuestra gente a la autodestrucción..

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