jueves, 23 de mayo de 2019

El Delito de Odio Original por John Kaminski


Fuente base: johnkaminski.org

¡Qué estafa! El columnista del New York Times Paul Krugman ésta es una maravillosa prueba de cuán penetrantemente engañoso puede ser el apoderamiento judío de todos los medios de comunicación, ya que éstos de repente cambian el foco sobre un Presidente desde ser alguien completamente controlado por los judíos a través de toda su vida, a ser el líder súper-patriótico de un golpe de Estado nacionalista blanco. Sólo un judío podría realizar un truco como ése.

La mayoría no escucha nada sobre esto porque la misma gente que comete los crímenes posee los medios de comunicación y ha comprado a todos los políticos.

¿Ha notado usted? Cualquier cosa que el gobierno no quiere que usted sepa, de repente se convierte en una causa de campaña popular en los medios predominantes de comunicación, como prohibir todos los comentarios sobre muertes causadas por vacunas y la incapacidad del público para demandar a los fabricantes de vacunas después del asesinato de sus seres queridos por las inyecciones.


Los gigantes de los medios judíos de comunicación —Amazon, Google y Facebook— repentinamente se han convertido en armas del gobierno, imponiendo la censura a decenas de millones de personas que el gobierno mundial del Estado Profundo nunca podría conseguir. Que quede claro en vuestra propia mente: Amazon, Google yFacebook son parte del gobierno del Estado Profundo y están dispuestos a borrar el último vestigio de vuestra privacidad.


Confío en que no necesito decir que esas tres malévolas empresas están poseídas por judíos y siguen el modo de pensar talmúdico de tratar al ganado rudamente y eliminarlo tan rápidamente como la logística lo permita.


La destrucción hecha por Amazon de toda la verdadera evidencia sobre la Segunda Guerra Mundial fue sólo una de muchas violaciones flagrantes de las llamadas protecciones constitucionales de los estadounidenses.


En cuanto a la mencionada aseveración de Paul Krugman, Trump ha jugado con los sentimientos de la Derecha patriótica estadounidense casi perfectamente. Por cierto, ha habido algunos errores, como referirse a aquellos musulmanes que estaban al otro lado del río durante el 11-S, siendo que todo el que ha estudiado ese acontecimiento sabe que se trataba de israelíes.

Hipocresía de los Delitos de Odio

¿Quién es el que tiene que hacer leyes para esconder la verdad y poner a la gente en la cárcel por cuestionar sus mentiras obvias?


¿Quién es el que debe menospreciar a otras religiones con términos más propios de muchachos ignorantes que leen pornografía que de adultos maduros que respetan las maravillas del sexo?


¿La hstoria de quién es tan sórdida, tan robada y tan inauténtica que ellos deben recurrir a cambiar todos los hechos de la Historia para encubrir sus crímenes?


Hoy es más que irónico que aquellos que gritan más fuerte sobre delitos de odio tengan como la pieza central de su filosofía religiosa un omni-abarcante escrito de odio contra cada no-judío en el planeta.

Ésa es la única religión en el mundo que aprueba la violación de niños y la estafa a otros. El dominio del dinero por parte de los judíos a través del tiempo ha deformado profundamente a cada nación que ha infectado, y las ha dejado como los cadáveres exangües de las sociedades que ellas solían ser.


Por medio de su expropiación legal del suministro de dinero de Estados Unidos, el mundo ha sido destruído por guerras, ha visto escenificados colapsos económicos y millones de personas inocentes asesinadas en nombre del lucro militar, que no beneficia a nadie excepto a los muy ricos que trabajan muy duro para mantener a todos los demás en la oscuridad.



Hubo una vez que cuando oí el título de Los Protocolos de los Sabios de Sióntambién oí el desmentido de parte de los judíos de todas partes de que aquello era una "falsificación". Una falsificación de qué, muchos han preguntado. Yo siempre he considerado a dicho escrito el documento histórico más vivo y exacto que yo haya visto alguna vez. Henry Ford y Adolf Hitler, dos campeones de la libertad individual, vieron las cosas de la misma manera. 

 El Talmud judío es el delito de odio original.

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