domingo, 12 de mayo de 2019

Tor Fredrik Vejdeland..otro perseguido.


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Tor Fredrik Vejdeland, editor de Nordfront.

Desde la trinchera oficial: www.nordicresistancemovement.org este impresionante articulo del periodista sueco Tor Fredrik Vejdeland, editor de Nordfront, el periódico oficial del Nordic Resistance Movement, hizo una exposición en Enero de 2015 ante un tribunal de apelación en Suecia, tras ser acusado por la fiscalía de haber cometido un "delito de odio", invención judeo-marxista para acallar el disenso en las totalitarias democracias.

El acusador designado por el ministro de Justicia, Fredrik Ingblad, construyó el caso sobre un "muñeco de paja", usando interpretación de hechos y otros trucos retóricos con los cuales él logró manipular al tribunal. Ingblad se concedió a sí mismo derechos de interpretación, y dio su propia definición tendenciosa del Nacionalsocialismo y de lo que éste significa, con la intención de convencer al tribunal de que Nordfront apoya el odio racial, la persecución racial y el genocidio-exterminio.

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Fredrik Ingblad, el perseguidor.


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Björn Hurtig, el valiente defensor.


Después de las declaraciones de cierre tanto del abogado de la defensa, Björn Hurtig, como del interrogador Fredrik Ingblad, a Fredrik Vejdeland se le permitió concluír el arbitraje. Un visiblemente enojado Ingblad reaccionó fuertemente ante el tribunal por permitir que Vejdeland sostuviera su discurso. Ingblad interrumpió a Vejdeland, afirmando que él se sentía personalmente atacado, pero fue reprendido posteriormente no sólo por un miembro del auditorio de la sala del tribunal sino por el propio Vejdeland, y por el juez que presidía el caso.

El ARGUMENTO en FAVOR del NACIONALSOCIALISMO
PRESENTADO por VEJDELAND.


En primer lugar, quisiera informar al tribunal que el caso contra Nordfront presentado por el ministro de Justicia está políticamente motivado. Para nosotros es obvio que el ministro de Justicia quiere avanzar para prohibir toda una ideología. Pero por cuanto va en contra de la Constitución prohibir ideologías, el ministro de Justicia y el fiscal Ingblad pretenden prohibir cualquier mención de esa ideología bajo una luz positiva, lo que esencialmente lleva a lo mismo.


Durante cada proceso, él se refiere a un juicio anterior en el cual otra expresión ha sido prohibida. Y este caso es en gran medida parte de esta maniobra para incrementar la censura. Sólo un día después de que el tribunal de distrito de Örebro declaró ilegal llamar a Hitler un héroe del pueblo, la oficina del fiscal de distrito comenzó una nueva investigación acerca de una etiqueta autoadhesiva con una imagen de Hitler; una imagen de un Hitler relajado en un agradable ambiente de oficina, sentado en una mesa con un jarrón de flores al lado suyo. Según Ingblad, eso representa un "discurso de odio".


Estoy seguro de que si el tribunal de distrito prohíbe esta etiqueta autoadhesiva, y ustedes me encuentran culpable hoy, entonces esto conducirá a posteriores persuasiones para aumentar la censura. Los siguientes pasos para el ministro de Justicia serían ciertamente procesar a los escritores y los editores de todos los artículos que presentan o hablan del Nacionalsocialismo bajo una luz positiva, lo que haría imposible al final para un Nacionalsocialista, en principio, abogar en favor de su propia ideología.


Un día ustedes deben poner un límite sobre cuánto uno puede abusar del sistema legal; sugiero que sea hoy. Me gustaría que ustedes se sentaran y pensaran acerca de si realmente debería ser ilegal llamar a algún líder político —sin tener en cuenta su ideología— un héroe popular. En mi opinión —que comparto con muchos otros— Josef Stalin fue un asesino de masas. Pero yo encontraría absurdo si alguien fuera condenado en un tribunal por haber elogiado a Stalin en términos generales. Y si un miembro del Partido Comunista rinde un homenaje a Vladimir Lenin, en términos generales, tengo que asumir que la persona de quien hablamos no está abogando por el asesinato masivo de millones de cristianos, sino que más bien hay alguna otra razón para honrar a Lenin.


Sería igualmente poco sano suponer que todos los líderes de las democracias son asesinos de masas en base a las acciones de Winston Churchill y Franklin D. Roosevelt y sus bombardeos terroristas de ciudades alemanas, en nombre de la democracia. O porque Harry S. Truman dejó caer múltiples bombas atómicas sobre Japón en nombre de la democracia. O porque George W. Bush ha estado detrás de un millón de civiles iraquíes muertos en una guerra emprendida... en nombre de la democracia.


Ustedes deben comprender cuán absurda es esta acusación. ¿Cómo puede un reconocimiento general de Hitler llevar a una condena simplemente porque alguien más está adivinando que ese tributo general es acerca de la celebración de un específico período de tres años durante los 56 años de la vida de Hitler? Me refiero al período de tres años en el cual se supone que el "Holocausto" hubo ocurrido. Si nosotros, en Nordfront, hubiéramos elogiado antes el "Holocausto" eso habría sido un asunto diferente. En ese caso, las afirmaciones de Ingblad habrían tenido alguna relación, pero entonces por supuesto, nosotros ya habríamos sido condenados por"discurso de odio" sobre la base de que estábamos apoyando el asesinato de masas. Nunca lo hemos hecho y nunca lo haremos. También puede ser relevante para este caso el que nosotros creemos que el presunto "Holocausto" —es decir, el exterminio sistemático usando cámaras de gas— nunca ocurrió. No los voy a aburrir con una larga dilucidación en cuanto al "Holocausto", pero como abogados, ustedes seguramente deben ver que no hay ninguna evidencia técnica de que eso haya ocurrido alguna vez. No hay ninguna orden documentada, ni tampoco ningún informe de autopsia que indique que siquiera un solo judío fue gaseado hasta la muerte.


Según nuestras creencias, el "Holocausto" fue propaganda de guerra de los vencedores a fin de demonizar a sus enemigos, condenarlos en los procesos de guerra en Núremberg, y apartar el foco lejos de sus propios crímenes de guerra. Además, el "Holocausto" siempre ha sido una lucrativa industria para Israel. En 1975 el Primer Ministro de Israel David ben-Gurión [el primero en ese cargo] dijo que la mitad de la infraestructura de Israel había sido construída con el dinero de las reparaciones alemanas de guerra.


Y mucho después de la guerra —y no menos hoy— el presunto "Holocausto" sigue siendo usado como un arma política para proteger de la crítica a un cierto grupo. Y esta arma política está siendo usada hasta hoy en este caso judicial. No se me permite criticar la influencia judía en países occidentales sin que Ingblad juegue la carta del "Holocausto" en un contexto completamente irrelevante. Si el "Holocausto"hubiera ocurrido —si surgieran pruebas irrefutables de que eso ocurrió— yo sería el primero en admitir que me equivoqué. Pero —y aquí quiero ser extremadamente claro— incluso si hubiera ocurrido, eso no tiene nada que ver con la ideología Nacionalsocialista ni con nuestra actitud hacia los logros políticos y sociales de Hitler en favor del pueblo alemán.


En el sitio web oficial de la Unión Europea, Winston Churchill es descrito como uno de los padres fundadores de Europa y un "líder visionario", sin el cual no nos encontraríamos hoy "viviendo en el reino de paz y estabilidad que damos por supuesto". La Unión Europea no menciona ni una sola vez los bombardeos terroristas de Churchill de ciudades alemanas como Dresden y Hamburgo, ni tampoco ellos mencionan la decisión conjunta de Truman, Stalin y Chiang Kai-Shek de emplear la bomba atómica sobre Japón. Por lo tanto, si a la Unión Europea se le permite describir a Churchill como "un hombre de paz", entonces Nordfront debe tener el derecho de llamar a Hitler un héroe del pueblo.


Unos días antes de que publicáramos el artículo que llamó a Hitler un héroe del pueblo, publicamos otro artículo que elogiaba a Hitler, que definía claramente sobre qué estaba basado dicho tributo. Ese artículo también fue reportado a las autoridades, pero el ministro de Justicia no lo persiguió, lo que nos llevó a creer que estaba de acuerdo con la ley describir a Hitler bajo una luz positiva, incluso de un modo general.


El artículo declaraba:


"Por el sistema de asistencia social que ahora damos por supuesto, tenemos que agradecer a Adolf Hitler y al Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes. Cosas tales como vacaciones pagadas, subsidio por enfermedad, subsidios familiares y subsidios de cesantía, no existían antes de ser presentadas por el NSDAP. El Estado benefactor sueco está copiado directamente del programa de política social del NSDAP. (...)
"Cuando Hitler subió al poder en 1933 había siete millones de personas desempleadas en Alemania. En cuatro años, Hitler derrotó totalmente la cesantía".


Ésta no es la primera vez que hemos escrito sobre las políticas sociales de Hitler que no sólo salvaron a los alemanes de la catastrófica situación en la cual ellos se encontraban, sino que también ayudaron al mundo a crear sistemas políticos y sociales que han sido para beneficio de muchos pueblos, de los cuales la gente de Suecia no es la menor parte.


Yo debería ser capaz de concluír mi argumento aquí y confiar en que ustedes, los abogados que representan al Estado constitucional de Suecia, entenderán que uno no puede ser juzgado por el contenido de un artículo escrito que, en términos generales, honra a una persona "X" como un héroe del pueblo, ya se trate de Hitler, Roosevelt, Churchill o cualquier otro criminal de guerra real o presunto. Pero por cuanto el tribunal de distrito de Örebro realmente me procesó por esto, y hasta tuvo la audacia de afirmar que el veredicto era "coherente con la ley del Estado constitucional", debo explicar claramente de qué se trata nuestra ideología, para nosotros. Es relevante para este caso que yo proporcione un cuadro total del Nacionalsocialismo, y que nuestra visión de ello —no sólo la del fiscal Ingblad— sea presentada al tribunal.


Hasta este punto, he sido condenado porque Ingblad ha engañado completamente a los jueces del tribunal de distrito de Örebro al presentar su propio falso cuadro del Nacionalsocialismo, y por el astuto uso de trucos retóricos. Ingblad es un experto en hacer uso de lo que se llama "culpa por asociación" así como de la falacia llamada "argumentum ad populum" [apelar al juicio de la gente para dictaminar la validez de un argumento]. Simplemente dicho, Ingblad declara que porque yo soy un Nacionalsocialista y Hitler era un Nacionalsocialista que gaseó judíos, entonces yo también debo querer gasear a judíos: "culpa por asociación". Ingblad también se refiere a los supuestos prejuicios y presunciones de la gente con respecto a nosotros, y cree que debería ser bastante para una condena legal el que las personas ajenas perciban la mención positiva general de Hitler como una indicación de que yo estoy a favor del odio y el exterminio racial. Éste es el"argumentum ad populum".


En uno de los procesos judiciales contra nosotros, Ingblad realmente inventó un nuevo concepto legal que él llama "interpretación de hechos". Eso es obviamente una versión refinada de la "culpa por asociación". Por cuanto nosotros compartimos la misma creencia que Adolf Hitler —eso es un hecho—, entonces cuando describimos a Hitler como un héroe popular en nuestro sitio web eso debería ser interpretado como que nosotros apoyamos el odio racial, la persecución racial y el exterminio de otras razas.


Aquí hay una cita de los argumentos finales de Fredrik Ingblad en el tribunal de distrito:


"Cuando uno rinde homenaje a lo que sucedió durante el Tercer Reichy Adolf Hitler y el Nacionalsocialismo alemán, entonces eso se trata de undiscurso de odio.
...y no hay ningún error posible en cuanto a lo que él [Hitler] apoyó; es acerca de odio racial y persecución racial, una persecución y exterminio de otras razas excepto la nórdica.
...Cuando uno honra a Adolf Hitler y el Nacionalsocialismo en este contexto, entonces es esto lo que está siendo expresado, lo que se está honrando o para lo cual se está procurando encontrar aceptación".


Primero, Ingblad dice que "Cuando uno rinde homenaje a lo que sucedió durante el Tercer Reich y Adolf Hitler y el Nacionalsocialismo alemán, entonces eso se trata de un discurso de odio". Luego él sigue diciendo que lo que sucedió constituye odio racial y persecución racial y exterminio. Pero Nordfront NUNCA ha celebrado esas cosas, aunque Ingblad afirme que sí.


También significativos en este breve extracto del argumento de Ingblad son dos de los trucos retóricos que he mencionado. Primero, Ingblad dice que "no hay ningún error posible" en cuanto a lo que Hitler apoyó, convirtiéndose a sí mismo por ese medio en el portavoz de toda la gente; ése es el "argumentum ad populum" y es completamente tendencioso. Luego Ingblad habla acerca del contexto, de que nosotros de Nordfront debemos estar en favor del exterminio porque compartimos el mismo conjunto de creencias con Adolf Hitler; ésta es la "culpa por asociación", o, como Ingblad prefiere, "interpretación de hechos".


Estos términos —"culpa por asociación", "argumentum ad populum","interpretación de hechos"— pertenecen todos a uno de los libros de George Orwell, y no a un Estado constitucional como Suecia.


La ideología del Nacionalsocialismo es algo completamente diferente de lo que Ingblad presenta. El Nacionalsocialismo como movimiento político surgió en Alemania alrededor de 1920. Pero el Nacionalsocialismo como ideología, como una idea con puntos ideológicos, fue creado diez años antes en Suecia. Ese Nacionalsocialismo fue formulado por Rudolf Kjellén [1864-1922], un cientista político conocido como el padre de la Geopolítica y mucho más. Kjellén habló sobre la importancia de un sentimiento nacional entre su gente. Él dijo que el Estado es orgánico y consiste en la gente —que es una raza— y que todas las clases de personas trabajan juntas para eliminar las injusticias sociales. Kjellén llamó a eso la "comunidad nacional", y aquello fue un elemento crítico de lo que él llamó el Nacionalsocialismo. Kjellén habló en términos de cooperación dentro del propio grupo étnico, pero no habló de hostilidad hacia otros grupos étnicos o razas. Lo uno no conduce automáticamente a lo otro.

Además, los medios alemanes de comunicación estaban poseídos por judíos, el Partido Socialdemócrata era conducido por judíos, y los banqueros alemanes eran, en su mayor parte, judíos. Los judíos establecían la agenda de la nación alemana, y la influencia que esos individuos tenían fue usada, en muchos casos, para socavar a la nación alemana.

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