Como en cualquier operación realmente profunda, sólo un pequeño número de profesionales de la élite entiende la estafa básica. El resto es ciego, y aceptador. Algunos son voluntariamente ciegos. Ellos ven la verdad en un relámpago de perspicacia, y luego ellos callan.
Una de las dos agencias de salud pública más poderosas en el mundo no puede obtener el virus de ninguna parte. ¿Por qué? Obviamente, porque nadie lo tiene.
Los autores despreocupadamentre suponen que ellos en primer lugar pueden deducir de alguna manera que el virus existe, sin tener un espécimen aislado. Luego ellos suponen que pueden entender la estructura del virus que no está allí.
El virus no está allí. NO ha sido aislado. NO ha sido separado de otro material. Por lo tanto, no ha sido observado y su existencia no ha sido probada.
Los científicos predominantes harán dos afirmaciones: una, "Hemos aislado el virus"; y dos, "No es necesario aislar el virus, porque hemos descubierto su secuencia genética". Ambas afirmaciones son falsas.
Los autores despreocupadamentre suponen que ellos en primer lugar pueden deducir de alguna manera que el virus existe, sin tener un espécimen aislado. Luego ellos suponen que pueden entender la estructura del virus que no está allí.
El virus no está allí. NO ha sido aislado. NO ha sido separado de otro material. Por lo tanto, no ha sido observado y su existencia no ha sido probada.
Eso es como decir: "Hay un nuevo planeta en el Sistema Solar. No sabemos dónde está o cuál es su apariencia. No sabemos qué procesos están actuando en ese nuevo planeta, pero sabemos realmente que la Luna es una aproximación muy cercana del planeta. Por lo tanto, podemos saber todo lo que necesitamos sobre el nuevo planeta a partir de nuestro conocimiento de la Luna".
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