Ha transcurrido más de medio siglo desde el final de guerra y de la ideología nacionalsocialista, han fallecido ya casi todas las personas que vivieron en esos años y sin embargo en todos los países surgen constantemente grupos, movimientos más o menos encubiertos o editoriales, revistas etc.etc que se proclaman nacionalsocialistas, pese a los ataques de propaganda contraria, pese a las leyes represivas, pese a la manipulación, el miedo, el chantaje e incluso el asesinato de personas que se han atrevido a declararse nacionalsocialistas.
El marxismo y el capitalismo tienen como fin último la dominación mundial, los dos curiosamente utilizando la economía como arma arrojadiza sin darle ninguna importancia a las razas, pueblos, culturas...
El "socialismo" marxista ni mucho menos a ese socialismo en enemigo del sistema capitalista, convirtiéndose en capitalismo de estado. Una vez finalizada la revolución bolchevique, los sistemas de inspiración marxista convivieron en perfecta armonía con el capitalismo, sin causarle daños a este, en el ese estado se competía con los otros estados capitalistas occidentales usando las mismas normas de juego.
El socialismo del NS es nacional, esto es, en la Alemania del NS mientras la clase trabajadora alcanzo unas cuotas de libertad y prosperidad jamás alcanzadas en ningún sistema político, la burguesía tenia que apretarse los dientes, el NS fué el único y verdadero socialismo, por y para el pueblo, para la clase trabajadora nacional.
Veamos algunos casos:
- El concepto de fábricas limpias, iluminadas, ventiladas (se hicieron secciones del NSDAP dedicadas a ello, como “Belleza y dignidad del trabajo”) y creación de comedores en las fábricas, con cocinas donde se sirven comidas caseras a precios populares a los trabajadores, se debe al NS.
- El que un trabajador tenga en sus fábricas instalaciones deportivas donde poder hacer deporte y divertirse, a parte de cumplir honradamente con su trabajo, se debe al NS.
- El sistema de seguridad Social, que en países como USA no existen –si no hay dinero, no hay atención médica-, es una creación del NS. Ni es Gran Bretaña, ni en Francia, existía en aquellos años Seguridad Social.
- El que un trabajador tenga un mes de vacaciones pagadas, fletándose barcos a precios económicos para que el trabajador pudiera ir de vacaciones, fue un proyecto del NS.
- El que un trabajador pueda disfrutar de conciertos de música clásica en las fábricas, fue posible gracias a una organización del NSDAP que llevaba el hermoso nombre de “La Fuerza por la Alegría”.
- El que un trabajador pueda conseguir tener un coche a un precio ridículo al mes, se consiguió diseñando y creando el coche del trabajador, el famoso Volkswagen; pero aún iba el socialismo nacional más lejos. Pensando que el trabajador difícilmente podría ser feliz, si cuando acaba su jornada laboral se encuentra con todo cerrado –especialmente lo relativo a la cultura y el arte- solamente puede tener opción de acceder a ello durante el fin de semana. Pues el socialismo nacional solucionó la cuestión haciendo que cines, bibliotecas y museos tuviesen abiertas sus puertas a la hora que el trabajador acaba la jornada, y no sólo por el horario, sino haciendo que muchos eventos fueran gratuitos o a un precio muy asequible.
- También el socialismo nacional viendo que difícilmente podía ser feliz un trabajador feliz viviendo en pisos de 12 plantas como sucede en el año 2007, se empezó a dar casas unifamiliares a trabajadores, de una sola planta, con un pequeño huerto o jardín donde poder pasar tu tiempo libre, en una vivienda bonita.
Así sí que un trabajador puede ser feliz, ese auténtico socialismo de base popular constituía la respuesta definitiva a los anhelos de todo trabajador, alejado del otro “socialismo” vil, materialista, oscuro… que convierte al hombre en un número, rasando por la mediocridad.
Por ello, no debe extrañar que Hitler arrasara en los plebiscitos. Ese cambio radical producido en pocos meses desde la llegada del Nacionalsocialismo al poder fue tan evidente que el ciudadano pasó de necesitar un furgón lleno de billetes para poder pagar un viaje a Berlín a Bonn, a tener una nación de las mas fuertes del mundo, con un nivel de paro cero, disfrutando de un alto nivel de vida, y de las primeras autopistas de Europa (que aún las disfrutamos), gratuitas por supuesto, despertando la admiración en todo el mundo.
No se necesito mucho para desmontar al capitalismo, simplemente dio en los sitios donde el capitalismo se sustentaba:
Primero; abolió el patrón-oro por el que se medían las economías de los estados capitalistas, cambiándolo el patrón trabajo. La principal fuerte de garantía de una nación no residía en las reservas de un metal, sino en la capacidad de trabajo de los alemanes.
Un siguiente paso fue la abolición de la especulación como fuerte de ingreso. Quedo prohibido el que haya gente que sin trabajar amasasen tremendas fortunas, especulando con el dinero. Al dinero se le dio el fin que ha de tener: facilitar el intercambio de cosas que el pueblo pueda necesitar.
Así, el dinero deja de ser un “tótem” sagrado, como lo es en las sociedades capitalistas. Mediante la prohibición de la usura, los banqueros de repente con su chollo absolutamente extirpado.Estas medidas llevadas a cabo por el Nacionalsocialismo, aniquilaron el poder de la alta finanza internacional sobre la nación. Compárese ahora con el modelo marxista…, resulta más que evidente cuál de los dos es el verdadero enemigo del capitalismo.
Y entonces, ¿Qué se encuentra detrás de las leyes penales que prohíben expresamente el Nacionalsocialismo en los estados capitalistas? La respuesta parece diáfana: lo prohíben porque es realmente socialista y destruye la política capitalista.
¡POR EL SOCIALISMO NACIONAL!
Cualquier ideología, bien sea política, o religiosa, ética, filosófica o de cualquier otro tipo, está sujeta a dos situaciones concretas indiscutibles: O existe, y hay una jerarquía que determina su funcionamiento y actualiza o determina su pensamiento, o simplemente no existe y al cabo de unos pocos meses, como mucho unos pocos años, desaparece sin dejar rastro y queda como un recuerdo del pasado.
En esa época, pasada existían dos tipos definidos de nacionalsocialistas. Los que se creían lo que decía la propaganda contraria y los que no se lo creían. Los primeros, lógicamente, eran violentos, fundamentalmente antijudíos y racistas radicales y exhibían toda la ideología que el cine había presentado como la esencia del
nacionalsocialismo.
Los otros, en cambio, no eran nacionalsocialistas debido a lo que decía la propaganda enemiga, sino que lo eran en base a la propia propaganda del nacionalsocialismo, los textos oficiales, los discursos de Hitler, los libros de la Editora del Partido, los diversos folletos y revistas de propaganda editados en el III Reich en dos docenas de idiomas etc. etc.
Los primeros, los primates y violentos, eran gente marginal que lo mismo llevaban una svástica que la Holly Rogers de los piratas, simplemente porque son símbolos agresivos, los segundos eran personas normales que habían llegado al nacionalsocialismo a través de la lectura y del conocimiento personal con gente que vivió en el III Reich o incluso que ocupó cargos de más o menos responsabilidad.
Y así, aunque existiesen ciertas diferencias en el pensamiento ideológico de los nacionalsocialistas que habían llegado a él a través de la lectura y la documentación, las coincidencias eran mucho mayores que las divergencias y la cosa, pese a la falta de una estructura internacional válida y de un comité ideológico fiable, existía más o menos una cierta cohesión entre las diversas personas que se declaraban nacionalsocialistas, pudiendo formar parte de los "Hollywood nazis" o de los "nacionalsocialistas auténticos" y poco más.
Las cosas han cambiado de manera sustancial. La propaganda nacionalsocialista se ha intensificado de manera impresionante en los últimos años. Si comparamos la propaganda de post-guerra -años 1945 a 1950, por ejemplo-, con la actual, nos daremos cuenta de que hoy en día el mensaje anti-nacionalsocialista está presente en documentales, películas, seriales, informativos... en una proporción enormemente superior a la de la época de post- guerra tiempo en el que se supone que debería ser más intensa y radical. No es así. La explicación muy sencilla.
Aunque la propaganda repitiese mil veces lo mismo, existían personas que habían vivido aquella época y que podían desmentir o matizar las informaciones. Ahora la cosa es muy diferente. Ya no queda prácticamente nadie de los que vivieron aquella época y cualquier cosa que se diga por televisión, prensa o radio, no será nunca desmentida.
Antes no podía ser desmentida en el medio que la había difundido ya que el teórico "derecho de réplica" no se aplicaba nunca a los nacionalsocialistas, pero de boca a boca, en tertulias y reuniones, los que conocían o habían vivido la realidad daban su propia versión de los hechos. Actualmente esto no es así.
La falsa noticia queda en el aire y unos la creerán y otros no, de acuerdo con sus propias inclinaciones en cada tema. No se trata ya de una cuestión de autenticidad o falsedad sino de "me gusta" o "no me gusta". Desde el final de la II Guerra Mundial la propaganda contraria al nacionalsocialismo únicamente se ha ocupado del tema judío y el racismo y ahora, muertos prácticamente todos los que vivieron aquella época, todos los nacionalsocialistas, sin excepción, son exclusivamente racistas y anti-judíos, unos moderados y otros radicales, unos pacíficos y otros violentos, pero en todo caso únicamente se interesan en esos dos temas.
Podemos coger a diez mil nacionalsocialistas en todos los países del mundo y ninguno sabrá nada de la política social del III Reich, de la educación, el arte, el deporte... pero en cambio todos ellos serán expertos en racismo y judaísmo, habrán leído multitud de libros o folletos a respecto, dispondrán de una medianamente nutrida biblioteca circunscrita a esos temas y podrán expresar claramente sus opiniones sobre judíos y palestinos, inmigración, etc. etc.
Ya en tiempos del III Reich la "Raciología" consideraba a la etnia alpina como la inferior entre las cinco etnias principales europeas y precisamente era su sentido de "neutralidad" lo que le confería esa baja puntuación. También la "tradicional" neutralidad de Escandinavia, era criticada por determinados ideólogos nacionalsocialistas.
La "neutralidad" es una postura de conveniencia, de comodidad... somos "neutrales" en el caso de un despido en la empresa donde trabajarnos, intentando seguir a bien con el injustamente despedido y con la dirección de la empresa, somos "neutrales" en el tema de determinado divorcio, intentando quedar a bien con las dos partes implicadas, somos "neutrales" en una pelea en la calle pues preferimos que los demás arreglen sus problemas...
Y ese sentido de neutralidad hace que en las filas de los diversos movimientos nacionalsocialistas abunde, prolifere y se multiplique rápidamente la actitud "neutral". Todo el mundo quiere estar bien con todos y eso se toma equivocadamente por colaborar a la unidad cuando lo que hace es impedirla.
Se "disculpa" a aquel dirigente que ha estafado a todo el mundo, simplemente porque vende libros nacionalsocialistas lo que le permite vivir sin trabajar, se "disculpa" a aquella persona cuya vida privada es impresentable simplemente porque da donativos cuantiosos, se "disculpa" a aquella persona que ha actuando violentamente ya que ha sido "por la causa”.. y lo mismo en la plano ideológico, se apoya tal o cual revista islámica, homosexual, esotérica, skin, rockera, ocupa o lo que sea, porque tiene un articulo bueno, porque las fotos son de gran calidad, porque están contra el sistema, porque en ella colabora tal o cual personas que tiene suficiente crédito...
Y así, con esa neutralidad llevada a la exageración, se asiste a los actos organizados por todos, se leen todas las revistas, se compran todos los libros... y con todo ello esos, los "neutrales", son los auténticos y únicos responsables, del caos actual dentro del nacionalsocialismo.