Con un apoyo abrumador de los principales partidos políticos del país, el Parlamento alemán ha aprobado una resolución comprometiéndose a una acción renovada contra el antisemitismo.
Alemania se comprometió a elaborar un informe sobre todas las cuestiones relacionadas con el tema del antisemitismo, como una forma especial de la xenofobia, como prioridades específicas. La resolución fue apoyada por la Unión Demócrata Cristiana, el Partido Social Demócrata, el Partido Liberal Democrático y los Verdes, la resolución fue bien recibida por los miserables líderes judíos alemanes.
Dieter Graumann, la sanguijuela jefe del Consejo Central de los Judios en Alemania, elogió el Bundestag para dar una señal como creíble de su compromiso de luchar contra el antisemitismo.Deidre Berger, otro miserable colaboracionista de la oficina de Berlín del Comité Judío, dijo en un comunicado que es un plan de acción que ahora se necesita con urgencia de cómo y cuando las medidas que se han acordado se llevará a cabo.También, el ministro del Interior, Hans-Peter Friedrich de Alemania dijo que la lucha contra el antisemitismo debe involucrar a toda la sociedad democrática.
Como una buena sierva la canciller alemana, Angela Merkel, recibio la Medalla Presidencial de Israel de Distinción del Presidente Shimon Peres.
Recibir el premio más alto otorgado por Israel es un gran honor, despues de la responsabilidad de Alemania por el tremendo sufrimiento del pueblo judío en el Holocausto, recibir este premio es casi un milagro, dijo la miserable lacaya. La miserable Merkel llegó a Jerusalén con 16 de sus ministros de gobierno a cuestas, para reunirse con el gobierno del Estado terrorista de Israel.
La única nota discordante fue cuando, durante una conferencia de prensa con Netanyahu señaló que no estaba de acuerdo con sus demandas de enriquecimiento de armas nucleares, dijo que si Irán era una amenaza para Europa, tambien Israel. Merkel también vino regalos, un nuevo visado de "turista de trabajo" que permitió a varios cientos de israelíes trabajar en Alemania durante 12 meses una iniciativa destinada a ser popular entre muchos jóvenes israelíes. El acuerdo, sin embargo, no está exento de críticas. Noah Kliger, un periodista del Yedioth Aharonot , le recordó que Alemania sigue siendo el país cuyos dirigentes decidieron acabar con el pueblo judío hace tres generaciones.
Incluso dio lugar a una respuesta un poco extraña desde el ministerio de Asuntos Exteriores israelí, aclarando que la iniciativa no estaba destinado a alentar viejas heridas.
Merkel, estaba llena de gratitud por el premio.
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