La primera cultura germánica de la que tenemos noticias se haya en la Escandinavia meridional, en la llamada península de Jutlandia y las tierras conocidas en la actualidad como Schleswig-Holstein. Hacia el 500 antes de nuestra era, se expande por la costa sur del Báltico, entre Weser y Oder, siguiendo la gran llanura centroeuropea que les permite llegar hasta el curso del Rhin, Turingia y la Baja Silesia. En este momento entran en contacto con los grupos celtas que habitaban esa zona y que fueron quienes probablemente les dieron el nombre de “germanos”
Dice Tácito:
No es fácil que en un germano prevalezcan las cualidades para arar y trabajar la tierra, esperando recoger el fruto pacientemente; antes prefiere desafiar a un enemigo y atacarlo para ganar fortuna y una recompensa, el germano piensa que es de débiles acumular riqueza lentamente pudiendo obtenerlos rápidamente a cambio de sangrar un poco.
El tipo de guerra que mantenía esta sociedad no tenía nada que ver con el tipo de luchas a vida o muerte entre Roma y Cartago, por ejemplo, donde el objetivo que perseguían ambos bandos era la destrucción total del enemigo. En la temprana sociedad germana, así como en muchas otras sociedades guerreras, las luchas eran casi un ritual que formaban parte de la vida.
La mayoría de las luchas entre familias o clanes eran la mayoría para acumular riquezas y prestigio, o calculadas venganzas a previas ofensas por parte del oponente, y entonces se procedía a su total derrota y destrucción. Las armas y las tácticas eran relativamente simples,y aunque en sus batallas había múltiples bajas, es poco probable que fueran masivas.
El contacto con los adelantados romanos tuvo muchos efectos en la sociedad germánica:la guerra, ciertamente, derivó más mortífera, las armas y el equipo fueron mejorados; y aquellos germanos que vivían próximos al Rhin se encontraron de repente a sí mismos teniendo que luchar para sobrevivir. Como resultado de esto, reducidas tribus y y clanes comienzan a aliarse en confederaciones y fueron de este modo capaces de atraer a su alrededor un gran contingente de hombres.
Muchos germanos sirvieron en los ejércitos de Roma,y muchos de ellos volvieron a sus tierras de orígen al terminar su servicio. Así,aquellos que habían obtenido riqueza y prestigio, eran elevados a una posición preeminente.
El contacto con los adelantados romanos tuvo muchos efectos en la sociedad germánica:la guerra, ciertamente, derivó más mortífera, las armas y el equipo fueron mejorados; y aquellos germanos que vivían próximos al Rhin se encontraron de repente a sí mismos teniendo que luchar para sobrevivir. Como resultado de esto, reducidas tribus y y clanes comienzan a aliarse en confederaciones y fueron de este modo capaces de atraer a su alrededor un gran contingente de hombres.
Estos hombres también llevaron consigo las ideas y técnicas romanas de orden y control, así que no era nada sorprendente que los grandes líderes germanos, tales como Marobodus y Arminius, hubieran servido en el ejército romano.
Desde el siglo III al I a.C, continuaron esta migración hacia el sur y el oeste, empujando a los pueblos celtas fuera de su núcleo original y provocando las migraciones celtas, continuando moviéndose por la zona hasta la conquista de la Galia en el 58-51 a.C. por Julio César, y la posterior organización del limes danubiano en Recia y Nórica hacia el 16-15 a.C. por Octavio Augusto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario