domingo, 24 de agosto de 2014

No hay evidencia física o forense !



Ya sea "Holocausto por el gas" o "Holocausto por balas": no hay evidencia física o forense!


En una sentencia dictada el 26 de abril de 1983, los altos jueces franceses reconocieron el carácter científico de mi propia investigación y sus conclusiones sobre lo que el historiador Olga Wormser-Migot, en 1968, llamado "el problema de las cámaras de gas". Llegaron a la conclusión de que todo el mundo debería tener el derecho de decir, como lo había hecho, que esas supuestas armas de destrucción masiva no existían y, además, no podría haber existido . Esa decisión de la primera cámara, sección A, de la corte de apelación de París, presidida por François Grégoire, se puede leer,,en http://robertfaurisson.blogspot.it/1983/04/communique-texte-de-Larret-du -26-avril.html .
Fui yo quien, el 19 de marzo de 1976, descubrió los planes de construcción , mantenían cuidadosamente oculto hasta entonces, de los crematorios de Auschwitz y Birkenau supone que contienen (homicidas) cámaras de gas. Esos planes revelado que esos crematorios no tenían cámaras de gas pero contenían, según el caso puede ser, ya sea un depositario de órganos a nivel del suelo ( Leichenhalle ), depositarios semi-enterrado para la protección contra el calor del verano ( Leichenkeller ), u otro igualmente inocua habitaciones. Muy pronto había señalado que los historiadores y los jueces que se ocupan de la "genocidio de los Judios" y las "cámaras de gas nazis" eran contenidos, como en cuestión esos dos temas, con "testimonios" o "confesiones" y fríamente prescindido de cualquier físico pruebas . En particular, a pesar del hecho de que era, al parecer, un asunto de los crímenes que eran atroces y metódico, innumerables y sin precedentes, nadie había buscado pruebas forenses de la existencia y operación de una sola de esas cámaras increíbles. Con una excepción, sin embargo, que se produjo en 1945, en Francia, en relación con la supuesta cámara de gas del campo de Struthof-Natzweiler cerca de Estrasburgo. Y no, no hubo suerte para la acusación! El 1 de diciembre de 1945, el Profesor René Fabre, decano de la facultad de farmacia de París, después de haber llevado una investigación, cerró la investigación toxicológica con un hallazgo doblemente negativo: no había rastros de cianuro de hidrógeno (HCN), ya sea en la supuesta cámara de gas o en los cuerpos de los Judios supuestamente gaseadas (parcialmente conservado en el Hôpital Civil de Estrasburgo). Cabe destacar que el informe forense sería, en una fecha indeterminada, desaparecer de los archivos de la gendarmería y de los tribunales militares (en Le Blanc en el Indre departamento ), pero, por fortuna, en 1982, yo personalmente descubrió un informe firmado por los expertos médicos Simonin , Fourcade y Piedelièvre acredite conclusión doblemente negativa del profesor Fabre. No menos notable es el hecho de que, a pesar de mi publicación de estos descubrimientos sobre informe forense del profesor, los historiadores tercamente no les hizo caso. Y esto hasta el punto, por ejemplo, donde un Robert Steegmann ni siquiera mencionó el nombre de René Fabre en las dos obras por un total de 875 páginas que dedica a Struthof (en 2005 y 2009 respectivamente), y en la que presentó como un hecho establecido la existencia y el funcionamiento de una cámara de gas homicida en ese mismo campo ( http://robertfaurisson.blogspot.fr/2013/05/il EST--temps-den-finir avec--la-chambre.html ).
Yo fui la primera y, durante muchos años, el único de cuestionar la existencia y el funcionamiento de la cámara de gas nazi mágica mediante la producción de pruebas de un física, química, naturaleza arquitectónica y topográfica, evidencia que, sin embargo, se utiliza con bastante frecuencia en investigación criminal de la policía técnica (con investigación en el lugar de un arma del crimen), así como en el de la policía científica (con análisis de laboratorio). Me puse a la realización de numerosos estudios y consultas en varios campos científicos en el laboratorio central de la prefectura de policía de París, con expertos en gas en Francia y en el extranjero, con los fabricantes o usuarios de Zyklon B para la desinfección, con especialistas de cámaras de gas para la desinfección o desinsectación, de hornos crematorios, etc Sobre todo, yo particularmente volví mi atención a las cámaras de gas de ejecución utilizados hasta la década de 1990 en las prisiones americanas (que funcionan con HCN, que pasó a ser el ingrediente activo de Zyklon B, el insecticida supuestamente utilizado para exterminar los Judios en el curso de "el Holocausto"). Me sorprendí al encontrar que en Alemania, Austria y Estados Unidos, donde los ingenieros y químicos fueron apenas faltan, al parecer nunca se había pedido a ninguna pregunta acerca de la simple posibilidad de la formación de gases de millones de hombres, mujeres y niños con HCN, que es decir, con una sustancia explosiva, por lo peligroso de manejar que los norteamericanos tenían, con el fin de montar su sistema para la ejecución de una sola persona, ha obligado a diseñar y perfeccionar una habitación de acero extraordinariamente complicada con una puerta como la de un submarino y maquinaria sofisticada - especialmente para la eliminación de la ventilación del gas venenoso y su neutralización después de la ejecución, sin la cual un cadáver impregnado de HCN no se podía tocar, y mucho menos llevar. Para la ejecución de un solo preso toda la prisión estaba en pie de guerra tal, para un gaseamiento de ejecución era terriblemente más peligroso que un gaseamiento desinfección. El argumento de la cámara de gas de América resultó tan eficaz que, en cierto modo, mi estudio de la cámara real de gas de América permitió que el descrédito total de la cámara de gas imaginario alemán .Dicho esto, uno se queda desconcertado a la credulidad en la que, sobre este tema, persisten tantas personas del siglo XX y principios del siglo XXI. En estos siglos "de la ciencia", ha sido posible para engañar a miles de millones y convencerlos de que, durante años, los alemanes utilizaron un arma de destrucción masiva que nunca se ha demostrado más que de una forma vaga o fantasmagórica. Incluso hoy en día, los turistas en Auschwitz I se muestran alrededor del interior de un lugar llamado "cámara de gas", mientras que, como historiador Eric Conan finalmente admitió en 1995, "Todo en ella es falso" ( " Les falsificaciones d'Auschwitz d'après expediente ONU de L'Express " ; "Remarques sur le revista L'Histoire , décembre 1999 " ; "La 'cámara de gas' de Auschwitz I".
Pero no ha Padre Patrick Desbois hecho tanto con su "Holocausto por balas"? Él afirma haber descubierto, en Ucrania, los sitios de 850 fosas comunes con un millón y medio de cadáveres de judíos. El autor muestra las supuestas ubicaciones de algunos de ellos, pero no un cadáver, a menos que en un cementerio judío. Explica que un rabino, quien fue a consultar en Londres, le ha asegurado que las víctimas del Holocausto son santos y que, por lo tanto, nadie tiene derecho a perturbar su paz con las excavaciones. Y el truco funciona. Es suficiente con tener la fe holocáustico y creer, como los visitantes de la Museo Memorial del Holocausto de Washington creen que la inscripción sobre la fotografía, en el centro de la exposición permanente, de una impresionante pila de "zapatos de la cámara de gas" (sic), zapatos que, hablando, les dicen al unísono: "Somos los últimos testigos". Al principio las autoridades políticas, religiosas, académicas - toda la muchedumbre de ellos - agasajado Padre Desbois. Con su "Holocausto por balas" (y su "Holocausto por asfixia" bajo edredones o cojines) si no hubiera encontrado un sustituto para el "Holocausto por gas" que estaba mostrando signos graves de agotamiento? Por desgracia para el santo sanador, descrédito ha comenzado a golpearlo así, y su estrella se va desvaneciendo ("Querelle autour du Père Desbois", Le Monde (des livres) , 19 de junio de 2009).

La ciencia es sino un largo proceso de ensayo y error, entonces la corrección. Es, en su esencia, revisionista. En lugar de castigarlo como un criminal, el sistema de justicia debe proteger el investigador interesado en la precisión. Ese investigador es un benefactor de la humanidad, independientemente de si él quiere ser.
09 de abril 2014

Fuente: http://robertfaurisson.blogspot.nl.

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