sábado, 31 de mayo de 2014

La mafia de los comisarios psicopedagógicos

"Siempre hay sanguijuelas que se aprovechan de la estupidez humana"..Si eres nacionalsocialista primero lee a nuestros clásicos, lo demás vendrá por añadidura.. Quien siembra materialismo siempre recogerá capitalismo..  por eso nosotros los Nacional Socialistas pedimos la eliminación del progresismo en la educacion..ya que actualmente está al servicio directo del Mercado pero SOLO despues que previamente la Escuela Pública tenga la calidad absoluta por eso aceptamos la desigualdad, para los alumnos puedan ser tratados según su nivel y condiciones.   Tras unos años de locura total, una vez logrados los objetivos de esa etapa, el Sistema logró establecer el gran pacto de futuro, la consecución de un entorno basado en el Mercado como Ser Supremo, junto a la mentalidad progresista y sus ëvalores de izquierdaí como recubrimiento externo, mera estructura mental con la que disfrazar el poder mercantilista indiscutible.
La Educación, como reflejo que siempre es de la Voluntad Política, siguió perfectamente estas pautas.
Por ello la Escuela democrática se basa en dos facetas que reflejan perfectamente ese pacto:
n Por un lado una Escuela que desea fomentar los ideales igualitaristas e impone una ideología progresista, forzando una igualdad inexistente.
n Por otra parte una Escuela que fomenta la conversión de los jóvenes en ëproductoresí del Mercado, y que acepta absolutamente la desigualdad económica que el Mercado impone.
La educación actual en las escuelas se basan en estos dos errores llevados al extremo en todos sus aspectos.
Al tratar de imponer la igualdad en todo lo que significa valor personal, nos lleva a absurdos como mantener en una misma clase a chicos superdotados con auténticos retrasados mentales, jóvenes delincuentes con niños pacíficos, creando una situación insostenible. Se ha llegado a la brutalidad de ver alguna escuela privada que a los niños de 10 años ya les dan clases de economía y ordenadores, antes de saber realmente leer o formarse en el sentido de la Vida.
Todo el sistema educativo es una máquina creada por el Mercado para poner a su disposición ëproducto humano trabajadorí, mientras fomenta la destrucción de la vida personal elevada, el arte, el estilo, la dignidad, mediante un progresismo igualitario.                                                                                                LA ESCUELA "COMPRENSIVA"
La palabra comprensividad está aquí mal traducida del inglés, y quiere decir la Escuela Integradora. Esta concepción propgresista se ha impuesto gracias al ESO (Educación Segundaria Obligatoria) y la LOGSE en España, que obliga a que todos los chicos hasta los 16 años se agrupen en un mismo nivel por la edad, independientemente de sus problemas y capacidades.
Tras unos pocos años de usar este sistema, ya se ha visto que el desastre es total allí donde la diversidad entre alumnos es grande, y donde no se puede ir a escuelas privadas.
Octavio Fullat, Presidente de Consejo Superior de Evaluación ya dijo tranquilamente que "un bachillerato integrado paga el precio de la mediocridad", o sea de la nivelación por lo bajo: la clase debe seguir el ritmo que marcan minorías de retrasados y conflictivos. Cesar Coll asesor Ministerior de la Reforma Educativa decía "Los alumnos brillantes no resaltarán". Se trata de nivelar siempre por lo bajo.
Para acabar de asegurar ese nivel ínfimo, la LOGSE indica que se deben valorar los progresos de los alumnos basándose en los ëobjetivos generales del ESO, no en función de las necesidades de conocimientos necesarios para el curso siguiente. De forma que fomenta el aprobado general, basado en la buena voluntad de todosí, en vez de valorar los resultados de conocimiento y conducta. Mucho menos de la conducta que en realidad ni se tiene en cuenta ya entre los criterios de evaluación.
Ante una Escuela Integrada, los alumnos mejores tratan de marcharse a la privada (si pueden), los profesores no tienen más remedio que ajustarse al nivel inferior, mientras los gamberros y mal educados campan por sus respetos al no poder ser expulsados ni corregidos. LA MAFIA DE LOS PSICO-EDUCADORES
"Siempre hay sanguijuelas que se aprovechan de la estupidez humana"
La LOGSE ha implementado un sistema de ëcontrolí de los Colegios basado en una clase de sanguijuela neurótica llamada expertos en psicología educativa. Son los comisarios políticosí de la Reforma igualitaria, y los encargados de aplicar la estupidez igualitaria ,impedir que el sentido común se imponga sobre la Ley insensata.
El Consejo Escolar que gobierna una Escuela está formado por profesores, Alumnos, Padres ,dueños de la escuela y los comisarios políticos.
La realidad es que ante el temor de ser acusados de fachas o de tiranos, los temas de educación y disciplina quedan en manos de esos comisarios psicopedagógicos, que imponen las ideas utópicas de forma que aquello que con sentido común se arreglaría, con sus teorías de laboratorio se complica hasta el infinito.
La solución que esa gente da siempre se basa en dos fundamentos:
Rebajar el nivel para que nadie se sienta discriminado.
Echar la culpa de todo a los ënormalesí y la gente natural.
La teoría de Valorar las diferencias que tanto esgrimen es completamente distinta a lo que nosotros entendemos con esas palabras. Para el Sistema valorar las diferencias significa que aquellos chicos con problemas de inteligencia, voluntad o conducta, deben ser valorados de forma más positiva, de manera que alcancen el mismo aprobado que los demás. Valorar su incapacidad significa para esos lerdos aceptar que pese a ellas sean iguales a los demás en sus resultados.
Lo más jocoso es que esto sólo se logra hasta que acaban la educación básica, para luego lanzarlos al Mercado, que los tratará a todos no según su capacidad ni su igualdad teórica sino según su dinero. LA CULTURA CLASICA COMO ENEMIGA DEL SISTEMA

"Si eres nacionalsocialista, primero lee a nuestros clásicos. Lo demás vendrá por añadidura"
El contenido utilista de la educación aumenta mes a mes, plan tras plan, mientras hacen desaparecer todo aquello que tiene un contenido humanista, que les recuerda su identidad cultural, su esencia humana, su innato desprecio al materialismo mercantilista que se trata de imbuir.
El progresivo desprecio por lo que el progresismo llama Canón Occidental está llegando a posiciones inauditas. Prohiben leer a los clásicos mientras hacen leer auténtica basura escrita. Los textos recomendados son cada día más decadentes. Sexismo, neurosis, problemas de tarados mentales, actitudes pútridas, un submundo de clientes de psicoanalista freudiano y por supuesto literatura anti-fascista, eso en todos sitios.
Hace poco un diario publicaba un trabajo de la Universidad de Vigo donde se investigaba la literatura juvenil y se indicaba que según recomendaciones de la Universidad de Londres y Frankfurt se había llegado a la conclusión de que estas obras clásicas infantiles y juveniles son nazis y fascistas. Se llegaba a recomentar que no se dejase leer a los chicos textos de hadas y héroes (que son blancos todos, fachas, rubios y racistas, según esos idiotas progresistas actuales).
Se han editado ya versiones politicamente correctasí de los cuentos infantiles y las leyendas populares donde ,por ejemplo, Caperucita Roja es una estudiante concienciada que se enfrenta a un nazy (el Lobo) que quiere matar a los inmigrantes (la abuelita), para al final ser salvada por los demócratas (el cazador)..
La eliminación del Latín es un mero ejemplo, constatado también por la minusvalía de la Filosofía, de la Historia del Arte o la Literatura cultural. ¿Cómo vamos a obligar a una masa de moros y negros que invaden Francia a estudiar la literatura delicada de Moliere y la historia de los Francos Carolingios?¿que interés tienen en esto un inmigrante del Congo y un vietnamita? ¿como se van a identificar con la historia francesa, por ejemplo, el negroide hutu que apenas se interesa por el Rapí que escucha en su casa?.
¿Van a sentir el amor por Roma y la cultura Griega los turcos que pueblan Alemania gracias al capitalismo?
Hace poco una profesora mestiza francesa se quejaba que en los cuadros de la pintura clásica todos los negros que salen siempre son criados y saltimbanquis vaya por dios!, y para evitarlo proponía que algunos personajes importantes de la Historia se representaran como negros, jocoso! y así empezaron por Cleopatra, y Anibal, entre otros Cleopatra, de la familia Ptolomeica, una griega reina de Egipto gracias al dominio de Alejandro de ese país, convertida en una negra nubia! todo para apoyar esa educación igualitaria imbécil.
El latín ha sido sistemáticamente atacado por inútil. Y claro que lo es si se pone el Mercado como objetivo de la Educación. El Latín tenía como objetivo integrar al joven con su origen cultural, lingüistico y cultural. De Grecia y del Latín viene nuestra cultura, su conocimeinto básico era una forma de aprender a respetar la propia identidad. La lectura de los Griegos era antes una formación fundamental, no por su utilidad sino por su calidad humanaí. Pero claro, que le dirá este tipo de educación a quien sólo busca un puesto en el Mercado, y mucho menos al inmigrante.

Eva..una gran mujer

Hija de un maestro de escuela y de Franziska una modista quienes tuvieron tres hijas, Ilse, Eva y Gretel. La familia de Eva era una típica familia católica de clase media baja.

La joven era rubia, atlética, delgada y elegante. Amante de los deportes, la música y el baile. Le apasionaba el ski acuático, la gimnasia, el alpinismo, la natación y el ciclismo. Como buena amante de la naturaleza adoraba a los animales y por eso le gustaba tener mascotas.

Muchos historiadores la tildan de cabeza hueca y poco inteligente, capaz sólo de interesarse en las novelas rosa como extremo ejercicio intelectual. Sin embargo, hizo un gran esfuerzo por educarse y saber comportarse socialmente, por eso pudo ser una buena anfitriona.

Después de terminar sus primeros estudios, se graduó como secretaria. A los 17 años, Eva trabajaba como asistente de oficina en el estudio de fotografía de su amigo Heinrich Hoffman, que fue el fotógrafo oficial de Hitler. Más tarde se convirtió en ayudante de laboratorio para el procesamiento de las fotografías. Fue en el laboratorio que Eva adquirió la gran afición por las fotos y el cine. Donde quiera que fuera, Eva llevaba cámaras de fotografía y de cine en 16 mm y gracias a esa afición es que hoy se encuentran cientos de fotografías y películas de la época que pasó con Hitler en el Berghof (Nido del Águila). En el laboratorio, conoció a Hitler en 1929 de quien se enamoró inmediatamente. Su padre no estaba de acuerdo con esa relación, no porque se tratara del hombre más poderoso de Alemania y de Europa, sino porque sabía que el no se casaría con Eva, sino que la mantendría como su amante. En una carta a su hermana Ilse, Eva describió a Hitler como "un caballero de cierta edad, con un gracioso mostacho y llevando un gran sombrero de fieltro." Eva tenía 21 años y Hitler 43.

Después de la muerte de la sobrina y amante de Hitler, Geli Raubal, Eva se dedicó a consolar a Hitler convirtiéndose en su amante mientras vivía en su apartamento en Munich. Pero Eva debía soportar los celos que sentía por las mujeres que acosaban a Hitler, como la hija de Hoffman, por ejemplo. En 1935, después de uno, de al menos dos intentos de suicidio, Hitler le compró una casa en un suburbio de Munich cerca a su casa paterna y le puso a su disposición, un automóvil Mercedes con chofer. En el primer testamento de Hitler, Eva Braun aparecía como la primera beneficiaria de sus bienes. En caso de muerte ella debía recibir £600 al año por el resto de su vida.



En 1936 se mudó al Berghof en Berchtesgaden donde se convirtió en la anfitriona de la casa. Eva era indiferente a la política y se mantenía alejada de los círculos más íntimos de Hitler. Eva vivía una vida solitaria en la casa de retiro del Führer y lo mismo hizo más tarde en Berlín. Muy raras veces apareció con Hitler en público, al extremo que muy pocos alemanes conocían su existencia. Incluso algunos íntimos del Führer desconocían cuál era la exacta relación que existía entre el Führer y la inquieta y no poco atractiva Eva Braun. De hecho Hitler prefería evitar sugerencias de intimidad y demostraba sentirse incomodo al encontrarse con ella en compañía de invitados.

Eva pasaba la mayor parte del tiempo haciendo ejercicios, meditando, leyendo novelas baratas, viendo películas románticas y preocupada con su apariencia personal. Para matar las horas de aburrimiento, invitó a su prima de 20 años Gertrude Weisker, quien años después escribiría un libro relatando las horas pasadas durante ese verano en el Berghof.

Su lealtad absoluta por Hitler nunca se hizo del todo evidente, hasta el atentado del 20 de julio de 1944, cuando le escribió "Desde nuestro primer encuentro juré seguirte a donde fueres, aún hasta la muerte. Sólo vivo para ti mi amor."

En abril de 1945, se mudó al Bunker del Führer y a medida que los rusos se aproximaban a la Cancillería, Hitler la urgía a salir de Berlín, pero se negaba diciéndole que ella era la única persona que le sería fiel hasta el final.



viernes, 30 de mayo de 2014

El Mito del Abuelo "Judío" de Hitler

Otros han puesto al "abuelo judío" de Hitler en el limbo, la difamación más reciente de la incansable Máquina de la Mentira,
El HOMBRE estaba en lo correcto, mientras más enorme y absurda es una mentira, más rápido captura la imaginación pública y es creída, y es más difícil de disipar, veamos uno de los mitos mas absurdos..

No es cuestion de investigar todas las Grandes Mentiras que han sido propagadas sobre Adolf Hitler, el nacionalsocialismo y el Tercer Reich, sino más bien concentrarnos en una de las más duraderas y perniciosas de estas mentiras: la de que Hitler era de ascendencia parcialmente judía.
...pues las grandes masas de personas en el fondo mismo de sus corazones tienden a estar corrompidas más bien que ser deliberadamente malas, y que, por lo tanto, en vista de la simplicidad primitiva de sus mentes, ellos caen más fácilmente víctimas de una mentira grande que de una pequeña, ya que ellos mismos mienten en pequeñas cosas, pero estarían avergonzados de mentiras que fueran demasiado grandes. Tal falsedad nunca entrará en sus cabezas, y ellos no creerán que alguien fuese capaz de tal descaro monstruoso y falsedad infame; sí, aun cuando estén informados sobre el asunto, ellos dudarán mucho tiempo y vacilarán, y seguirán aceptando al menos una de las afirmaciones como verdadera. Por lo tanto, de incluso la mentira más insolente siempre algo permanecerá y se mantendrá... (Mein Kampf, Libro I, cap. X).



Es una de las crueles ironías de la Historia —aunque quizás no unainesperada― el que habiendo expuesto y denunciado la técnica de la Gran Mentira ante el mundo, Adolf Hitler mismo se convirtió en el sujeto de un montón entero de falsedades y calumnias.

Hay una serie de variaciones del mito "Hitler era en parte judío", que generalmente tienen dos cosas en común: 1) la mayoría de ellas se basa en la acusación de que el abuelo paterno de Hitler era un judío, y 2) todas han sido completamente desacreditadas por las pruebas documentales disponibles. Que esa acusación sea todavía hoy repetida es una evidencia del odio duradero y apasionado que los enemigos de Adolf Hitler todavía conservan hacia él, incluso ahora, décadas después de su muerte. Al mismo tiempo, es un ejemplo clásico del desprecio por la verdad que muchos historiadores anti-Hitler del Sistema muestran cuando hablan de la época nacionalsocialista en Europa.


De hecho, la familia Hitler, incluso el abuelo paterno de Adolf Hitler, es de un linaje ario intachable. Por medio de los archivos de nacimientos, muertes y matrimonios conservados por la Iglesia católica, es posible remontar a los antepasados de Hitler a cientos de años.


La familia, que vivió desde tiempo inmemorial en Austria Superior, era de un sólido origen campesino alemán, y los antepasados inmediatos de Hitler eran todos pequeños granjeros o artesanos. (La excepción notable a esto, por supuesto, fue el padre de Hitler, Alois Hitler, que era un funcionario comisionado en el servicio austriaco de aduanas). La ortografía y la pronunciación del apellido como "Hitler" es un desarrollo bastante reciente. Las versiones más antiguas incluyen "Huettler" y "Hiedler", siendo la primera el apellido original del cual se derivaron las otras formas [El nombre puede derivarse de "Huette", la palabra alemana para "choza"] (1).


(1). Para una buena discusión de la familia de Hitler, y especialmente de los antecedentes inmediatos de Adolf Hitler, vea Bradley F. Smith, "Adolf Hitler: His Family, Childhood and Youth", capítulos 1 y 2, passim, Hoover Institution Publications, Stanford, California, 1967.


La única irregularidad en la ascendencia de Hitler fue la ilegitimidad de su padre. Por cuanto él nació fuera del matrimonio, Alois Hitler llevó el apellido de soltera de su madre, María Anna Schicklgruber, durante una buena parte de su vida. Incluso después de que su madre finalmente se casó con [el padre de Alois] Johann Georg Hiedler, Alois conservó el apellido Schicklgruber. No antes de que él tuviera 39 años él reclamó su apellido apropiado, que él deletreó y pronunció en la manera que el mundo ha venido a conocer: ¡Hitler!.


Pero esta ilegitimidad en sí misma no es significativa o aún inusual. Como el historiador anti-NS Bradley F. Smith nota en su libro bien investigado y generalmente imparcial, "Adolf Hitler: Su Familia, Infancia y Juventud":


«A pesar de que la ilegitimidad era mal vista por las autoridades, sobre todo por la Iglesia Católica, era común en los campos austriacos. En algunos distritos, el 40 por ciento de los nacimientos era ilegítimo. La cifra para Austria Inferior en 1903 era todavía del 24 por ciento. Un hijo natural en una casa campesina, por lo tanto, no era un fenómeno extraño...» (p. 20).


Inusual o no, la ilegitimidad de Alois ha servido como una base fáctica de extrema importancia para aquellos que procuran difundir la falsedad de que Hitler tenía un abuelo judío.




Las Primeras Calumnias


Como cualquiera que tenga una experiencia de primera mano en el movimiento racialista sabe, es una práctica común de los judíos mismos intentar de vez en cuando desacreditar a prometedoras personalidades anti-judías esparciendo rumores falsos de que este o aquel líder es realmente un judío, o un homosexual, o un comunista o un agente del gobierno. En efecto, con difamaciones de esta clase incluso algunos individuos dentro del movimiento racialista intentarán menoscabar a sus rivales políticos.


Adolf Hitler fue el objetivo de tal secreta y despreciable oposición desde dentro del Movimiento, al menos tan temprano como en Julio de 1921. Una camarilla de miembros del NSDAP que evidentemente sintieron que Hitler no estaba capacitado para conducir el Partido comenzó una campaña de rumores de que él era de ascendencia judía.


Como es siempre el caso en las historias acerca de los antepasados supuestamente judíos de Hitler, estos conspiradores no tenían absolutamente ninguna evidencia documental para sus afirmaciones, y confiaron en cambio en insinuaciones falsas, sospechas infundadas y rencores. Sus esfuerzos culminaron en la circulación de un panfleto del miembro del NSDAP Ernst Ehrensperger, que dice en parte:


«Hitler cree que ha llegado el tiempo para introducir la desunión y la disensión en nuestras filas a instancias de sus sostenedores en la sombra, y así promover los intereses de la Judería y sus secuaces... ¿Y cómo está conduciendo él esta lucha? Como un verdadero judío» (Werner Maser, "Hitler: Legend, Myth and Reality", pp. 9-10, Harper & Row, Nueva York, 1971).


Aunque éste pueda haber sido el primer esfuerzo para difamar al Führer en esta manera, ciertamente no fue el último. A lo largo de los años '20 y '30 aquellos que eran hostiles a Hitler propagaron diversas variaciones de este cuento, incluso versiones que eran a menudo mutuamente contradictorias. ElDaily Mirror de Londres vanamente trató de añadir un poco de sustancia a esta mentira en Octubre de 1933 publicando una fotografía de una lápida sepulcral de un judío polaco que había llevado el mismo apellido que el Führer. Dos periódicos judíos, Forward en Estados Unidos y Haynt en Polonia, rápidamente se hicieron cargo de esto para propagar esta particular historia posteriormente, siendo la implicación de esto que el judío difunto ¡era el abuelo de Hitler!.


Sin embargo, ya que este judío específico había nacido en 1832, él era sólo cinco años más viejo que el padre de Hitler, lo que significaba que él no podía haber sido el hombre que engendró al ilegítimo Alois [es decir, a menos que el judío en Polonia engendrara al padre del Führer en Austria a la edad de cinco años].


Así, la primera historia del "abuelo judío" fue puesta a descansar (Werner Maser, "Hitler: Legend, Myth and Reality", p. 10).


El infame propagandista anti-nacionalsocialista Konrad Heiden [Munich 1901 - Nueva York 1966], él mismo en parte judío, también sugirió en sus venenosas biografías de Hitler, publicadas en 1932 y 1936, que el Führer era de ascendencia judía.


Heiden afirmó de manera infame que Hitler era un Teppichfresser, un "mascador de alfombras" (*). Todos los historiadores descartan hoy sus libros como estupideces, entre ellos "Der Führer. El Ascenso de Hitler al Poder" (Boston, 1944), "Hitler: Una Biografía" (en dos volúmenes, 1936-1937, Zürich), "Nacimiento del Tercer Reich" (Zürich, 1934) e "Historia del Nacionalsocialismo" (Berlín, 1932).


(*) NdelT: La misma tontería sostiene el despreciable periodista estadounidense William Shrirer en su libro "The Rise and Fall of the Third Reich", en forma de diario, donde el 22 de Septiembre anota: «Pienso que Hitler está al borde de un colapso nervioso. Y ahora comprendo el significado de una expresión que miembros del Partido usaban cuando nos sentamos a beber en el Dressen anoche. Ellos hablaban del "Teppichfresser", el "come-alfombras". Al principio no lo entendí, pero luego alguien lo explicó en un susurro. Ellos decían que Hitler había estado teniendo una de sus crisis nerviosas últimamente y que en días recientes éstas habían tomado una forma extraña. Cada vez que él violentamente alude a [Edvard] Benes o a los checos, se arroja al suelo y masca el borde de la alfombra, y de aquí la alusión. Después de verlo esta mañana, puedo creer eso». Pero este pobre idiota mitómano y crédulo ignoraba que el chisme de Hitler comocomedor de alfombras era simplemente una mala interpretación, puesto que algunos periodistas franceses habían apodado a Hitler como "Teppichfresser" porque éste solía caminar hacia adelante y hacia atrás durante sus discursos. Los periodistas pensaron que por desplazarse tanto él destruiría muchas alfombras. Así es como surgió el apodo.


Aunque estos libros fueran altamente considerados en círculos hostiles al Movimiento, esta particular mentira fue correctamente juzgada como demasiado improbable para ser tomada en serio y fue generalmente desestimada (Werner Maser, op. cit., p. 12).




La Gran Mentira de Hans Frank Refutada


Por extraño que parezca, la versión más persistente del mito no fue ampliamente publicitada sino hasta 1956, mucho después de la muerte delFührer, con la publicación de "Hitlers Jugend: Phantasien, Luegen und die Wahrheit" (La Juventud Hitleriana: Fantasías, Mentiras y la Verdad) de Franz Jetzinger. Mientras que las tentativas anteriores de estigmatizar a Hitler acusándolo de ser en parte judío simplemente tomaron la forma de rumores infundados que eran tan carentes de documentación según estaban alejados de la realidad, Jetzinger al menos hizo algún esfuerzo para respaldar su caso.


Bradley Smith resume las acusaciones de Jetzinger:


En la edición alemana de su libro Hitlers Jugend (págs. 28-35), y sobre todo en el posterior resumen inglés, Hitler's Youth (págs. 19-30), Jetzinger sostiene, con entusiasmo creciente, que el padre de Alois Hitler era realmente un judío de Graz de apellido Frankenberger...


La única fuente de Jetzinger para estos sorprendentes argumentos es el libro "Im Angesicht des Galgens" (Ante la Horca), escrito por Hans Frank, antiguo abogado nacionalsocialista y Gobernador General de Polonia, mientras esperaba la ejecución en Nuremberg.


En un relato plagado de errores demostrables (que fueron expuestos en parte por la propia investigación de Jetzinger) Frank declara que hacia el final de 1930 él fue a Austria por órdenes de Hitler para investigar una amenaza de revelación de un presunto antepasado judío del Führer.


Hans Frank afirma que en Graz él se enteró de que la madre de Alois había sido empleada por la familia judía Frankenberger, que ella había quedado embarazada mientras estaba en su empleo, y que la familia le pagó un dinero de apoyo en años posteriores sobre la presunción de que el padre del niño era el joven Frankenberger... La narrativa de Frank es vaga y carece de evidencia que la confirme. Él sostiene que existían ciertas cartas para apoyar su historia, pero ni él ni nadie más ha sido capaz alguna vez de producirlas (Bradley F. Smith, "Adolf Hitler: His Family, Childhood and Youth", p. 157).


A pesar de que con toda seguridad no era su objetivo levantar otra vez el argumento del "abuelo judío", Jetzinger realizó de esta manera un servicio valioso a nuestro Movimiento, ya que su acusación incitó a otros investigadores a determinar de una vez para siempre la verdad o la falsedad del mito.


Lo que estos investigadores encontraron, por supuesto, era que Hans Frank estaba mintiendo.


El historiador y biógrafo alemán de Adolf Hitler, Werner Maser, quien es algo menos histérico en su oposición al nacionalsocialismo y a su fundador que otros escritores anti-NS, descubrió que:


«...Ninguno de los Frankenberger conocidos por haber vivido en Graz [la capital de la Austria Superior] podría haber sido el padre de Alois Schicklgruber, ni tampoco parece haber ningún rastro de algún judío alemán llevando ese apellido o cualquier variante de aquél en el siglo XIX.


«En efecto, a partir del final del siglo XV hasta una década después de la muerte de María Anna Schicklgruber, ningún judío era residente en Graz. Bajo los términos del tratado concluído el 19 de Marzo de 1496 entre el Emperador Maximiliano I y las ciudades de la región de Estiria, todos los judíos debían ser expulsados de la provincia hacia el 6 de Enero de 1497.


«...No antes de 1781, en el reinado de Joseph II, a ellos se les permitió entrar de nuevo en el Ducado de Estiria y entonces sólo durante unas pocas semanas a la vez... cuando eran admitidos en las ferias comerciales en Graz, Klagenfurt, Laibach y Linz contra el pago de una suma fija.


«Pero tan pronto como el 9 de Septiembre de 1783 los derechos de los judíos fueron nuevamente recortados, una medida que fue reforzada por regulaciones discriminatorias adicionales en 1797, 1823 y 1828. Esta situación permaneció inalterada hasta comienzos de la década de1860...» (Maser, p. 13. Vea también p. 351, f. 46).


En otras palabras, es simplemente imposible que en 1836 la abuela paterna de Adolf Hitler, María Anna Schicklgruber, pudiera haber quedado embarazada de un judío de Graz apellidado Frankenberger, antes de dar a luz a Alois Schicklgruber/Hitler, el padre de Adolf, en 1837.


Por supuesto, la verdad rara vez ha actuado como una restricción en los más rabiosos escritores anti-Hitler, como Jetzinger. Cuando en 1956 la revista alemana Der Spiegel publicó los resultados de una investigación que eran los mismos que las conclusiones de Maser, Jetzinger permaneció aparentemente impertérrito. Smith comenta:


"En el resumen inglés de su trabajo, Jetzinger descartó la historia deDer Spiegel, no por presentar nuevas pruebas sino repitiendo con un aumentado énfasis que él creía que el abuelo paterno de Adolf Hitler era judío" (Smith, op. cit., p. 159).


Es imposible averiguar hoy por qué Hans Frank dijo esta falsedad infundada e indignante. Está claro, a partir del estado confuso de su biografía (Smith, op. cit., p. 158), que él sufrió un colapso mental por la tensión que le provocaron su encarcelamiento y los procedimientos judiciales del farsesco tribunal de Nuremberg. Uno sólo puede suponer que la historia del "abuelo judío" que él relató fue producto de esta debilidad psicológica.


Está menos claro por qué Jetzinger aceptó la historia de Frank de manera tan poco crítica, sobre todo después de que fue objetivamente refutada por otros historiadores anti-nacionalsocialistas. Y es absolutamente asombroso que todavía otros historiadores continúen hasta este día repitiendo como loros tales tonterías frente a tal riqueza de pruebas sólidas que la refutan.



Alois Hitler, alrededor de los 65 años.


Escritores Anti-Hitler Ignoran la Evidencia


Por ejemplo, el historiador perteneciente al sistema Robert Waite, en un libro publicado en 1977 (aproximadamente 21 años después de la investigación de Der Spiegel), refiere la aseveración de Hans Frank de que el abuelo paterno de Hitler era judío, diciendo:


«A pesar de la reputación de Frank como "el Carnicero de Polonia", parecería haber razón para creer su historia. Él escribió sus memorias como un hombre condenado a muerte que se había convertido al catolicismo. Él escribió, en parte, para expiar sus pecados. Él no tenía ninguna razón aparente para tergiversar a Hitler o para inventar la historia» (Robert G. L. Waite, pp. 126-127, New York, 1977).


El trabajo de Waite, a propósito, se titula "The Psychopathic God Adolf Hitler", título que indica el nivel de objetividad histórica que el autor mantiene a través de todo el libro.


Otros, mientras repiten las acusaciones de Frank refutadas hace mucho tiempo, han sido menos entusiastas sobre una aceptación incondicional de ellas. Joachim Fest, en su biografía del Führer, concede que la historia de Frank es "sumamente dudosa" y que "la investigación reciente ha sacudido aún más la credibilidad de su declaración, de modo que la noción entera puede escasamente resistir la investigación" (Joachim C. Fest, Hitler, p. 15, Harcourt Brace Jovanovich, New York, 1973).


Después de afirmar esto, sin embargo, Fest se pone a especular con que Hitler mismo puede haber creído el improbable cuento de Frank y que "los descubrimientos [sic] de Frank obligaron a Hitler a dudar de su propia ascendencia". No debería sorprender que Fest no aporte ninguna evidencia para sostener esta peculiar noción.


Quizás la más ampliamente leída biografía reciente del Führer sea "Adolf Hitler" (1976) de John Toland. No haciendo caso de las investigaciones sobre la historia de Frank realizadas por Der Spiegel, Bradley y Maser —todas las cuales estaban disponibles para él—, y despreciando cualquier investigación personal en la materia, Toland dice que el padre de Alois Hitler fue probablemente un hombre de la vecindad. Hay una leve posibilidad de que el abuelo de Hitler fuera un rico judío apellidado Frankenberger o Frankenreither, y de que María Anna haya sido una empleada doméstica en dicha casa judía en Graz y que el hijo joven la hubiera embarazado (John Toland, Adolf Hitler, pp. 3-4, Doubleday & Company, New York, 1976).


Él continúa citando a Jetzinger como una fuente para esta historia, comentando que el libro de Jetzinger es "generalmente exacto". Debería ser hecho notar que Toland [1912-2004] puede haber tenido un motivo psicológico personal para desear creer el desacreditado cuento del "abuelo judío": Él mismo es un mezclador de la raza, casado con una esposa japonesa, y de ese modo él puede estar demasiado impaciente para proyectar su propia carencia de integridad racial sobre otros.


Incluso con toda su deshonestidad académica, Waite, Fest y Toland (cada uno de los cuales es al menos nominalmente ario) no comienzan siquiera a acercarse a la absurda afirmación hecha por el psicólogo judío Walter Langer.


En The Mind of Adolf Hitler (1972), Langer presenta lo que es quizá la versión más descarada e insultante de la mentira del "abuelo judío". En este análisis "psico-histórico" de la personalidad de Hitler, Langer relata una historia de la ascendencia de Hitler que sostiene que su abuelo paterno era realmente un miembro de la familia Rothschild que vivía en Viena. Él no ofrece un solo fragmento de evidencia o documentación para justificar esta notable afirmación, pero en cambio enumera "varios factores que parecen favorecer su posibilidad", entre los que incluye:


"...la inteligencia y la conducta de Alois [el padre de Hitler], así como la de sus dos hijos [Adolf y Alois hijo], está completamente en desacuerdo con la usualmente encontrada en las familias campesinas austriacas... Tal ambición y extraordinaria intuición política está más de acuerdo con la tradición Rothschild" (Walter C. Langer, "The Mind of Adolf Hitler. The Secret Wartime Report", p. 113, Basic Books, New York, 1972).


En otras palabras, Hitler era demasiado inteligente y capaz para haber provenido de un humilde origen campesino ario, y por lo tanto debe haber sido en parte judío...


...¡Qué increíble arrogancia!.


Langer, psiquiatra judío de Harvard, dice que un abuelo Rothschild dio a Hitler su brillantez; crear una Europa judenfreies, "sin judíos", FUE brillante.


Notamos antes que los primeros en difundir la patraña de que el Führer era judío fueron los opositores de Hitler dentro del Movimiento. Así, es triste pero no sorprendente que sus actuales críticos racialistas hayan tratado de dar nueva vida a esta falsedad. "Direct Action", un boletín de noticias racialista canadiense con inclinaciones nacional-bolcheviques, repitió la acusación de Hans Frank tan recientemente como en Diciembre de 1980 ("What Strasser Knew", Direct Action, N°26, pp. 10-11, Toronto, Canadá, Dic. 1980). Posteriormente hizo la acusación de que el líder SS Reinhard Heydrich era también judío en una cuarta parte, y declaró que uno de los verdaderos motivos por los que el traidor Gregor Strasser fue ejecutado en el momento del golpe contra Röhm era que él tenía "pruebas" de todo esto (Ibid., p. 11). El boletín de noticias no explica por qué Hans Frank no fue ejecutado por la SS también, si también él estaba en posesión de esta escurridiza "evidencia".




Las Mentiras Son Duras para Morir...


Las mentiras son duras de matar, sobre todo cuando ellas son deliberadamente propagadas por sinvergüenzas disfrazados como académicos o por aquellos que tienen un hacha política que afilar. Y sin embargo a veces los acontecimientos reales prestan un aura de credibilidad a lo que es falso.


La desafortunada atracción que el nacionalsocialismo ejerce sobre ciertos judíos inestables que se auto-odian y sobre semi-judíos, es bien conocida a través de todo el Movimiento.


Esto es particularmente verdadero de la grotesca y distorsionada parodia del verdadero nacionalsocialismo que ha sido etiquetada como "nazismo de Hollywood". Desde el renacimiento del Movimiento a principios de los años '60 [por George Lincoln Rockwell, 1918-1967, Comandante Naval en la 2ªGM y en Corea, y asesinado a sus 49 años], ha habido varios judíos que se han identificado tan fuertemente con el Movimiento que ellos han ocultado su ascendencia racial y se han unido a nuestras filas. En al menos tres casos, estos individuos enfermos se han elevado a posiciones de prominencia en los medios antes de ser expuestos sus antecedentes.


En el más notable de estos casos, Frank Collin/Cohn, fundador del grupo disidente que se llama a sí mismo el Partido Nacionalsocialista de Estados Unidos(NSPA), fue extensamente presentado al público por los medios de comunicación como el clásico ejemplo de un líder "nazi" que era secretamente un judío ("Immigration Records Prove Frank Collin is Jewish", White Power, N°86, págs. 4-5, George Lincoln Rockwell Party, Arlington, Virginia, Julio-Agosto 1978).


Este y otros casos similares sólo sirven para reforzar la creencia popular de que Hitler mismo era de ascendencia judía.




¿Insulto o Elogio?


Estos cuentos son propagados, por supuesto, con la esperanza de que ellos desacreditarán de alguna manera a Adolf Hitler, su Idea y su Movimiento. Los nacionalsocialistas toman tales acusaciones como un insulto, y con razón.


Aún así, en cierto modo, dichos infundios son un elogio involuntario. En el caso de grandes hombres, es completamente común entre judíos y otros desprestigiar su genealogía o reputación aria, o reclamar logros arios como propios. Ellos harían que nosotros creyéramos que Beethoven era un Negro.


Cuando los judíos y sus lacayos levantan tales absurdas acusaciones contra el Führer podemos indignarnos en apariencia, pero interiormente deberíamos sonreír.


Deberíamos sonreír porque sabemos que tales acusaciones son totalmente falsas, y pueden ser así demostradas. Pero también deberíamos sonreír porque sabemos, como nacionalsocialistas, que la memoria de Adolf Hitler pertenece no sólo a sus pocos discípulos fieles hoy sino en último término a la raza aria entera. Esto en cuanto a la vida de Adolf como un descendiente de los Rothschild.




Sólo Paula Hitler y Adolf sobrevivieron a su infancia en aquella época de alta mortalidad infantil rural. Paula Hitler nunca vaciló en su amor y lealtad a su hermano mayor. Paula escribió: "Adolf era el hijo mayor de nuestra patria austriaca" y "él siempre quiso lo mejor para Alemania" (12 de Octubre y 28 de Diciembre de 1957). En su declaración más famosa, ella escribió a los periódicos alemanes:


«¡Señores!


Nunca olviden esto: Vuestros nombres serán olvidados incluso antes de que sus cuerpos se hayan podrido en la tierra, pero el nombre de Adolf Hitler todavía será una luz en la oscuridad.
Ustedes no pueden asesinarlo ahogando su memoria en vuestros tarros de basura, y ustedes no pueden estrangularlo con vuestros sucios dedos manchados con tinta. Su nombre existe para siempre en cientos de miles de almas. Ustedes son lejos demasiado insignificantes para siquiera tocarlo.
Él amaba a Alemania, él se preocupó por Alemania. Cuando él luchó por el honor y el respeto era por el honor alemán, por el respeto para Alemania, y cuando no quedaba nada más, él dio a Alemania su vida.
¿Qué han dado ustedes hasta ahora?; ¿cuál de ustedes daría su vida por Alemania?. Las únicas cosas por las que ustedes se preocupan son la riqueza, el poder y artículos de lujo interminables. Cuando ustedes piensan en Alemania, piensan en complacer vuestros sentidos sin responsabilidad y sin preocupaciones.
Confíen en mí en esto: La total ausencia de egoísmo del Führer en palabras y hechos sólo garantiza su inmortalidad. El hecho de que la amarga lucha por la grandeza de Alemania no fuera coronada por el éxito, como ocurrió con Cromwell en Gran Bretaña, tiene mucho que ver con la mentalidad de las personas involucradas.
Por una parte, el carácter de los ingleses es esencialmente injusto, gobernado por los celos, la auto-importancia y una falta de consideración. Pero ellos nunca olvidan que son ingleses, leales a su gente y a su corona. Por otra parte, el alemán, con su necesidad de reconocimiento, nunca es, ante todo, un alemán.
Por lo tanto, a ustedes no les importa, ustedes seres insignificantes, si ustedes destruyen la nación entera. Vuestro único pensamiento guía siempre será: yo primero, yo segundo, yo tercero.
En vuestra insignificancia, ustedes nunca pensarán en el bienestar de la nación; y con aquella lamentable filosofía ¿ustedes desean impedir la inmortalidad de un gigante?».


Paula Hitler, Berchtesgaden, 1° de Mayo de 1957

Cultura Falsificada por David Lane

Se ofrece ahora la traducción del breve escrito de David E. Lane "Counterfeit Culture". El Precepto Nº25 establece que "Un pueblo sin una cultura exclusivamente propia, perecerá". Miremos lo que le ha sido hecho a nuestra cultura. Quizá tanto como cualquier otra cosa, los arios, cuando son libres para perseguir su propio camino, buscan la simplificación y el orden. Un ejemplo fácil serían los alfabetos. Los pueblos orientales formaron lenguajes escritos usando miles de símbolos, todos los cuales necesitaban ser aprendidos de memoria y escritos con precisión increíble. Los negroides permanecieron incapaces de producir ninguna clase de lenguaje escrito. Los arios, sin embargo, desarrollaron un sistema fonético en el cual cinco vocales y veintiún consonantes representaban todos los sonidos lingüísticos necesarios para nuestra expresión verbal. La simplificación y el orden permitieron a los pares de Shakespeare y Kipling dejar atrás sus genios. Nuestro lenguaje está en la raíz de nuestra cultura, pero es sólo una de las muchas facetas.

Hace muchos años, mientras estaba en el negocio inmobiliario, noté la diferencia que hay entre el orden de los arios y el caos de los hijos de Muspell, que ahora predominan sobre todas las naciones alguna vez Blancas. Me fijé que en las subdivisiones (de tierras) establecidas hace 80 ó 100 años atrás, que tenían nombres como Jones, MacIntosh o Wilson, las calles y las avenidas corrían de Este a Oeste y de Norte a Sur. Las manzanas urbanas eran o bien cuadradas o rectangulares. Generalmente las calles y las avenidas eran numeradas en orden consecutivo o por orden alfabético. Por ejemplo, en Denver, al Este de Colorado Boulevard, las avenidas están numeradas como 1, 2, 3, etcétera. Luego las calles son nombradas Albion, Ash, Bellaire, Birch, Clairemont, Cherry, Dexter, Dahlia, AA, BB, etcétera, con cada segunda calle nombrada con el nombre de un árbol. Un forastero que llegara a Denver podría ser dirigido a cualquier dirección sin fallar. Pero entonces aproximadamente hacia 1950 las subdivisiones comenzaron a ser nombradas como Pearlman, Goldman, Silverman, o a tener nombres corporativos. Las calles serpenteaban en un terrible revoltijo, entre las cuales incluso la policía local y los cuerpos de bomberos se perdían. Fue un ataque contra la cultura aria. Siempre los hijos de Muspell llevan el caos al orden de las tierras arias.


El arte es otro ejemplo. En el famoso discurso de George Lincoln Rockwell en la Universidad Brown, él hizo un trabajo genial al satirizar a Picasso y a otros de la "cepa escogida" con su así llamado arte moderno, que en realidad es la salpicadura de pintura en una tela por aquellos que carecen del talento o el deseo para crear retratos que parezcan vivos.

Que nuestro pueblo caiga por tal engaño me recuerda muchísimo la fábula acerca del traje nuevo del Emperador. Todo el reino, excepto por un niño inocente y honesto, pretendió que el Emperador desnudo iba vestido con magnífica exquisitez. El rebaño por siempre quiere ser políticamente correcto, y las multitudes son ciertamente asnos. Cuando teníamos una cultura propia, una persona estudiaba todo, desde anatomía hasta geometría, durante años, antes de atreverse a llamarse un artista. Pero el así llamado arte modernoproporciona satisfacción inmediata, y con los contactos adecuados o con propaganda es incluso premiado con riqueza y fama.


«El "refinado", el "rico", el "haragán profesional", el destilador de quintaesencias, sólo desean lo peculiar y sensacional, lo excéntrico, lo escandaloso, en el arte de hoy. Y yo mismo, desde el advenimiento del cubismo he alimentado a estos tipos con lo que querían y he satisfecho a estos críticos con todas las ideas ridículas que han pasado por mi cabeza. ¡Mientras menos entendían, más me admiraban!... Hoy, como usted sabe, soy famoso, soy rico. Pero cuando estoy solo, no tengo el descaro para considerarme un artista del todo, no en la grandiosa acepción de la palabra. ...Soy sólo un payaso público, un saltimbanqui. He comprendido a mi época y he explotado LA IMBECILIDAD, LA VANIDAD Y LA AVARICIA de mis contemporáneos. Es una confesión amarga esta confesión mía, más dolorosa que lo que puede parecer. Pero al menos, y al fin, tiene el mérito de ser honesta» (Pablo Picasso).



Luego está el baile. Nuevamente, cuando teníamos nuestras propias naciones, nuestros bailes eran majestuosos y ordenados. El reel de Virginia, el vals y la contradanza son ejemplos. Bailar era un tipo de cortejo refinado. La frenética danza negroide de esta época es una cópula simulada, no un cortejo. Esta cópula simulada está usualmente acompañada de alguna cacofonía, equivocadamente llamada música, que invariablemente está tocada a un nivel de decibeles diseñado para atraer la atención de extraterrestres en algún planeta distante. Lo ruidoso de la instrumentación sintetizada ahoga cualquier letra de canción, que ciertamente no tiene ningún valor compensatorio de todos modos.


Tan recientemente como cuarenta años atrás, tuvimos a Doris Day y Patty Page. Compare sus voces con los chillidos fastidiosos de Barbara Streisand y escuche cuán bajo hemos caído. En los cuarenta y más años de rock'n'roll sería toda una tarea encontrar cinco cantantes con el talento vocal de un Roy Orbison. Incluso la así llamada música country ha sido corrompida, lo que es muy evidente cuando se compara a Patsy Cline, Loretta Lynn o Hank Sr. con los intérpretes de hoy.


Cómo deseo que la joven gente Blanca escuchara o pudiera escuchar o ver producciones de Tchaikovsky, Wagner, Strauss, Beethoven, Rossini, Verdi y otros grandes compositores arios. La obertura 1812, la obertura William Tell y la obertura de Tannhauser son cultura aria de lo mejor. Y el 99% de la juventud de hoy no tiene ni idea. No es su culpa y es oh, tan triste. Pero el destructor foráneo sabe que mientras más una generación sea removida de su cultura, menos se preocupará por la preservación de la raza de la que brotó.


Considere los deportes. En primer lugar, los deportes modernos son simplemente una reencarnación del pan y circo de la Roma moribunda. Como los romanos ario-nórdicos se mezclaron con esclavos y extranjeros hasta desaparecer, las multitudes discutían acerca de los talentos de los gladiadores. Hoy día nuestra juventud idolatra a atletas negros, cada uno de los cuales tiene virtualmente un harem de nuestras últimas mujeres Blancas. Los deportesintegrados son una perversión del instinto territorial dado a cada raza y especie para asegurar la preservación de su propia naturaleza. Pero ahora llame a un Negro un "Denver Bronco" o un "Dallas Cowboy" y él llega a ser más importante que la supervivencia de nuestra propia raza. Y por supuesto, los deportes espectáculos son siempre un peligro, al menos cuando son llevados demasiado lejos. Los deportes deberían ser usados para mantener en buena forma el propio cuerpo, y no para entretener a personas que sólo miran televisión.

Podemos ver otro síntoma de descomposición cultural en el comportamiento de los atletas. En las sociedades arias a un hombre se le enseña a caminar de manera tranquila y a llevar un bastón grande. La aceptación tranquila de lo que el destino declarara era considerada como un signo de fuerza y madurez. Unos cuantos años atrás un par de jugadores suecos de tenis denominados Borg y Edberg caracterizaron este comportamiento. Entonces vinieron McEnroe y Connor con rabietas y conductas infantiles. Y los estadounidenses degenerados amaron este comportamiento semítico-negroide. Cuán bajo hemos caído.


Cuando yo era un menor en la escuela secundaria, y un jugador anotaba una marcación para el equipo de fútbol, él caminaba hacia el árbitro y le entregaba el balón con serena dignidad. Ahora hay un ritual primitivo de giros obscenos y sexuales como un baile de victoria.


Los cambios negativos pueden ser observados incluso en las nuevas maneras de conversación. En un país nórdico exigimos un espacio personal, y la conversación se da siempre a una distancia de al menos la longitud de un brazo. Primero noté el cambio en prisión, cómo hasta los hombres Blancos trataban de acercar sus cabezas a sólo pulgadas de la mía para conversar. Yo retrocedía y ellos daban un paso adelante. Esto es ajeno a nuestra cultura orgánica. Además, en tiempos pasados se nos enseñaba desde la infancia que la conversación innecesaria era grosera e inculta. El hecho es que el 99% de toda conversación humana hoy es carente de inteligencia, repetitiva, sin sentido y aburrida. Adicionalmente, ningún hombre puede pensar mientras su lengua se está moviendo o si las encías de algún otro están ondulando en su oído. Mientras más primitiva la raza, la persona o la cultura, tiende a ser más chillona. Mientras más avanzada es la raza, una persona o una cultura, tiende a ser más reposada.

Sólo hace cincuenta años se nos enseñaba que había que pensar antes de pronunciar cada frase, y luego ser preciso. Este asunto de "es como...", "mmm...", "¿capta lo que estoy diciendo?", "es como... usted sabe", "usted entiende lo que quiero decir", es decadencia cultural total.


Las prioridades y las percepciones son otras de las víctimas de la cultura no-aria. Hoy nuestras papas de sofá adictas a la televisión compran cambiadores de canal de televisión de control remoto de modo que puedan sentarse sobre sus flojos y gordos traseros y puedan ser espectadores de la decadencia en el retrete eléctrico. Entonces, un día ellos ven cuán gordos y poco atractivos son, de manera que gastan centenares de dólares por ingresar a un gimnasio para eliminar su gordura. Y por supuesto, todo lo que se requiere es la autodisciplina para dejar de rellenar sus caras con comida basura. Pero entonces, la autodisciplina es esencial para la alta cultura.


En materia de guerra, una sociedad decadente sin verdadera cultura se convierte en cruel. La guerra es ciertamente un infierno, y matar a los enemigos de uno es parte del decreto de la Naturaleza. Pero, por regla general, no es usual que los arios torturen a los cautivos, ni innecesariamente deberían matar a las mujeres y los niños. Dresden, Hamburgo, Waco y el asesinato cometido por Eisenhower de un millón de prisioneros (alemanes) de guerra después del fin de la Segunda Guerra Mundial demuestran cuán bajo hemos caído.


Alguna vez hace mucho tiempo, un "héroe" era alguien que resistía hasta el fin contra todo pronóstico. Ahora los "héroes" de Estados Unidos aprietan un botón y envían un misil a centenares de kilómetros de distancia para hacerlo estallar sobre personas indefensas, soldados y civiles por igual, y luego se les dan medallas.

Podríamos seguir sin parar hablando de drogas, consumo de alcohol, divorcio, aborto, pero no es necesario. En una cultura decadente aceptamos cualquier cosa que veamos sin cuestionar nada. Cuarenta y cinco años atrás me di cuenta de que en casi cada película, programa de televisión, revista o cartel publicitario, el varón era de pelo oscuro y de piel más oscura que la hermosa mujer Blanca. Se promovió la idea de que "oscuro es bonito", y aún continúa sin un final. Era excesivamente demasiado penetrante para ser casualidad. Aquellos que controlan cada aspecto de la vida en las alguna vez naciones Blancas estaban evidentemente programando a nuestras mujeres para traicionar a su raza, paso a paso.


Lo asombroso es que pocos lo notan hasta que les es señalado; e incluso entonces a nadie parece preocuparle. Ésa es una contaminación cultural tan poderosa que supera incluso al instinto de preservación de la propia raza dado por la Naturaleza. La religión es, también, un aspecto de la cultura. Todo el mundo sabe que desde el Papa hasta Billy Graham, los líderes religiosos prevalecientes están promoviendo ahora eliminar todas las barreras para el matrimonio inter-racial. No nos queda otra opción que apartarnos de cada aspecto de la así llamada cultura moderna, y reconstruír la nuestra propia. Será una tarea monumental, pero es esencial para nuestra lucha. Trato de demostrar lo que fue nuestra cultura y lo que debe llegar a ser; otros pelearán la batalla con migración y lucha armada. Cada uno debe servir en la medida de su habilidad. La extinción biológica es la consecuencia inevitable de la muerte cultural. Todos deben luchar con el fanatismo de la desesperación.



Debemos asegurar la existencia de nuestra gente 
y un futuro para los niños Blancos.
Porque la belleza de la mujer aria Blanca no debe desaparecer de la Tierra.






David Lane